Temen confusión para aquellos que pasan su vida en ambos países.
Mientras los estadounidenses adelantarán sus relojes una hora el domingo para iniciar sus horarios de verano para ahorro de energía eléctrica, los mexicanos mantendrán sin cambio su hora hasta el 1 de abril.
Este aumento en la brecha horaria podría generar tres semanas de confusión para aquellos que pasan su vida en los dos países.
Sin embargo, nadie a lo largo de la frontera espera problemas mayores y algunos dijeron que será como era antes de que México adoptara los horarios para ahorro de energía en 1996.
El portavoz de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos, Félix Garza, indicó que los dos gobiernos deberán coordinar sus horarios para el cierre de los puentes internacionales sobre el Río Bravo.
"Supongamos que abrimos nuestras operaciones en la bodega de carga a las seis de la mañana.... Van a ser las cinco de la mañana en México. Durante esa hora no vamos a tener nada de trabajo porque el gobierno mexicano va a estar trabajando. No nos podemos dar el lujo de quedarnos allí sin tener ninguna actividad", señaló Garza.
Por su parte, la vocera del consulado mexicano en McAllen, Miriam Medel García, señaló que los mexicanos y los texanos necesitan tener cuidado.
"Sólo le decimos a la gente que necesitan poner atención a los vuelos, las horas de oficina, esas cosas", agregó Medel García.
El cambio al horario de verano se anticipó en Estados Unidos este año en concordancia con la Ley de Política Energética del 2005.
"Es casi una ventaja para nosotros, aunque probablemente no lo sea para la gente que nos visite, pues para nosotros, podemos salir una hora más tarde y llegar allá una hora más temprano", señaló Bill Summers, de la firma Rio Grande Valley Partnership en Texas.