Reconoce Jurisdicción Sanitaria que la mayoría de los que venden comida desconocen manual de salubridad.
EL SIGLO DE TORREÓN
FRANCISCO I. MADERO, COAH.- Vendedores ambulantes que ofrecen comida a los ciudadanos, incumplen con los requisitos que pide la Secretaría de Salud; la Jurisdicción Sanitaria VII reconoce que es difícil monitorear si cumplen debido a que cambian constantemente de lugar y asegura que los comerciantes desconocen el contenido del manual de salud.
Ahora que los días se tornan más soleados, se ha notado un incremento de vendedores de antojitos, tacos, gorditas, nieve y frutas, en cualquier calle del primer cuadro de la ciudad; mediante un recorrido se pudo establecer que un gran número de ellos no toma las medidas sanitarias establecidas.
Los expendedores que se instalan en las esquinas no portan gorra ni mandil, e incluso algunos no traen las uñas bien cortadas. Además, ellos cobran al mismo tiempo que manejan los alimentos. Lo que representa un riesgo para los consumidores.
Uno de los requisitos para poder expender alimentos, es que las personas que los manejan o los venden directamente al público, deben contar con el documento que otorga la Secretaría de Salud, a través de la Jurisdicción Sanitaria número VII, denominado Paquete Integral de Salud.
Según la jefa de dicha dependencia de salud, Irma Santoyo, el manual se le entrega al interesado previa plática, pero los vendedores ambulantes ignoran su contenido.
El encargado del Departamento de Regulación Sanitaria, Herlindo Calderón, señaló que cuando se detecta alguna irregularidad en la operación, al vendedor se le condiciona y se le da un plazo para que corrija su falta.
?Le damos seguimiento hasta que se comprueba que está acatando las disposiciones de la Secretaría de Salud, de lo contrario procede la clausura de su negocio?, manifestó.
En el caso de los vendedores ambulantes, manifestó que es muy difícil trabajar con ellos porque cambian de lugar constantemente, pero cuando se les detecta en la vía pública, ?les damos una explicación sobre la manera en que deben trabajar?.
Con el fin de promover la cultura de la buena alimentación, la Jurisdicción Sanitaria número VII también está trabajando en las escuelas primarias con los niños a fin de despertarles la conciencia de que comer alimentos callejeros no es sano.
Peligro latente
Respecto a esta problemática, el director del Hospital General, Javier Zúñiga Fuentes, por su parte, explicó que en la vigilancia de los vendedores ambulantes que expenden alimentos callejeros, compete tanto a la Dirección de Salud Municipal como al área de Regulación Sanitaria de la Jurisdicción número VII, quienes deben sancionar o impedir el funcionamiento a todo aquél que no cumpla con las normas de salud.
Reconoció que representa un peligro latente para la salud de los consumidores, el hecho de que un vendedor maneje alimentos con las manos sucias, pues los contamina con miles de microbios y posteriormente vienen las enfermedades gastrointestinales e incluso la hepatitis A.