En el nuevo relleno municipal, que se ubica en la cercanía del poblado Pino Suárez, la basura se deposita en celdas subterráneas.
Inició operaciones la primera planta de biogás en el nuevo relleno municipal, con lo que se evitará que exista contaminación a cielo abierto de todos los residuos orgánicos que se generan en el municipio de Durango.
A nivel nacional, Durango es el segundo municipio -después de Aguascalientes- que puso en marcha este tipo de proyecto donde se utiliza tecnología de primer mundo, aseguró el titular de la Dirección Municipal Servicios Públicos, Guillermo Adame Calderón.
Explicó que a través de la instalación de una geomembrana, que es un hule donde se deposita toda la basura que produce la ciudad y a través de los ácidos que esta misma produce, se emiten diferentes gases como el metano y, por lo general, salen a la atmósfera.
Sin embargo, en la construcción de esta planta de manera subterránea se construyeron algunas mangueras que llegan directamente a un dispositivo que captura el gas metano y lo quema, lo que significa que lo transforma en bióxido de carbono.
En términos prácticos –puntualizó-, la planta de quema de biogás lo que hace es que reduce de 21 grados de calentamiento global a un grado, y esta diferencia de 20 grados son los llamados bonos de carbono, los cuales se registran ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) y se venden en los países europeos.
Mencionó que la compañía que se encargó de la instalación del equipo también tiene bajo su responsabilidad la comercialización de los bonos de carbono y de ahí obtiene para pagar su planta, ya que el Gobierno Municipal no invirtió en el proyecto y, además, obtendrá regalías.
El funcionario municipal afirmó que esta planta ya está operando y únicamente se está en espera de que los empresarios ingleses que se encargaron de su instalación vengan a la ciudad de Durango a entregarla.
Mencionó que en los próximos días se definirá la fecha del acto protocolario de entrega, ya que la planta ya está lista, está operando y en la actualidad ya existe el registro ante la ONU.
Indicó que por la venta bonos de carbono se tienen una estimación de que el Ayuntamiento de Durango, al finalizar el año, pudiera obtener recursos por el orden de un millón de pesos debido al funcionamiento de esta planta.
Sin embargo, también se firmó un contrato para la construcción de la segunda planta de biogás, la cual estaría ubicada en el antiguo basurero, lo que contribuirá a que exista menos contaminación ambiental en la ciudad de Durango.
En este lugar primero se tendrá que hacer un estudio de impacto ambiental; anteriormente ya se realizó una consulta ciudadana entre los vecinos y se recibió autorización del Congreso del Estado y el Cabildo.
Es decir, abundó Adame Calderón, únicamente faltaría por realizar la obra civil en este lugar, que se ubica en el oriente de la ciudad de Durango.
Por su parte, Rubén Rubio Hernández, coordinador de Proyectos de la dependencia municipal, dijo que se está contemplando convertir la basura en energía eléctrica, ya que con los mismos gases que se producen de los desechos se puede generar energía.
Sin embargo, para este ambicioso proyecto ambientalista se requiere la realización de diferentes estudios en el subsuelo, y en caso de que se pudiera obtener energía, ésta la absorbería el Ayuntamiento de la capital a costo más económico, al mencionar que la única ciudad donde se ha implementado este proyecto es Monterrey, pero a través de otro tipo de procesos.
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Recibirá certificación ambiental
El próximo 9 de agosto del presente año, el Municipio de Durango recibirá la certificación ambiental que otorga la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) a nivel central, por el manejo de residuos sólidos urbanos.
En el evento se contará con la presencia de autoridades de los tres órdenes de Gobierno, de acuerdo con lo informado por el titular de la Dirección Municipal de Servicios Públicos, Guillermo Adame Calderón.
Beneficios
Con este proyecto, de acuerdo con autoridades municipales, se logrará:
- Que exista menos daño al medio ambiente.
- Convertir el gas metano en bióxido de carbono, lo que evita afectación en la salud de los habitantes.
- Se generarán fuentes de empleo.
- Habrá entrada de recursos al Municipio por prestar la basura.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.
