CANATLÁN, DGO.- Hundido en la depresión, David Valenzuela Martel intentó privarse la existencia usando una cuchara; los internos dieron aviso oportuno y los médicos lograron mantenerlo con vida en esta ocasión.
David tiene más de un año en la prisión acusado por el delito de violación; a la fecha, el juez aún no le dicta la sentencia y ante la escasa visita de sus seres queridos, ayer entre 14:00 a 15:00 horas, intentó escapar por la puerta falsa: la muerte.
Ernesto González Ortiz, encargado del penal, al escuchar el grito de los internos de inmediato, solicitó la presencia de los socorristas de la Cruz Roja, para enviar al lesionado de urgencia al Hospital de Canatlán, donde le controlaron la hemorragia del antebrazo lado izquierdo.
Las intenciones de suicidarse de David datan de hace tiempo, pues tuvo la paciencia de sacar filo a la cuchara metálica con la que se causó un herida e intentó desangrarse al cortar la venas.
El encargado del penal señala que David no tiene problemas con los internos; al parecer, crece su tristeza por la poca presencia de sus familiares los jueves y domingos de cada semana.
Una vez que recibió curación de los médicos del Hospital, David, de aproximadamente 39 años, regresó a su celda, en espera de recibir sentencia.
VIEJA CÁRCEL
En este penal de Canatlán se encuentran 30 presos de Nuevo Ideal y Canatlán por diversos delitos, principalmente robo, homicidio y violación.
Dicho penal tiene ocho celdas, para una capacidad de 32 internos; por el momento esta casi está lleno. El año pasado las quejas radicaban en ese tenor, es decir, estaba sobrepoblado.