VICENTE GUERRERO, DGO.- Las banquetas y calles de Vicente Guerrero han sido invadidas por el comercio informal, obstruyendo el paso a los peatones y automovilistas.
En las principales calles se puede encontrar desde ropa usada, juguetes, elotes y hasta un vendedor de vehículos. Es lamentable ver cómo el primer cuadro de la ciudad ha sido invadido por el ambulantaje.
Además, este comercio callejero es una competencia desleal para los establecidos, pues aquéllos llegan y se posesionan de los mejores lugares y sin pagar nada, en deterioro de la economía de éstos.
Se pueden observar en la avenida Zaragoza, sobre todo frente al Mercado Abel Núñez, camionetas llenas de chile y verduras de la región.
La gente que viene de fuera se muestra sorprendida al no encontrar dónde estacionar su vehículo, ya que las calles principales están saturadas del comercio informal.
Esta ciudad cuenta con un tianguis los domingos en la calle 5 de Mayo, entre Zaragoza y Vicente Guerrero, donde pueden instalarse los comerciantes locales y regionales, pero en estas avenidas principales todos los días se colocan.
El problema radica en que el Gobierno Municipal no ha sido eficiente en su trabajo, carece de creatividad para darle solución al problema que cada vez se agudiza, además de que no existe reglamento que regule este comercio en el municipio, ni mucho menos hay un plan de reubicación.
Es evidente que este problema ha rebasado la capacidad de las administraciones y se han generado otros como choques y atropellamientos.
El propio Mercado Municipal está copado en sus cuatro entradas dificultando el flujo de los visitantes, además de generar problemas de salud e higiene.
