Una fotografía de archivo que muestra un vehículo de una compañía de seguridad privada estadounidense en las afueras de la oficina del primer ministro en Bagdad, Irak. (EFE)
Irak anunció hoy que revisará el estatus de todas las empresas privadas de seguridad que operan en el país, tras suspender la licencia de la estadounidense Blackwater, cuyos empleados estuvieron involucrados en un tiroteo que dejó ocho muertos.
El portavoz del gobierno iraquí, Ali al-Dabbagh, explicó este martes que el Ministerio del Interior revisará las operaciones de las compañías extranjeras y locales de seguridad 'luego del flagrante asalto conducido por miembros de Blackwater contra iraquíes'.
El citado ministerio suspendió la víspera la licencia de esa empresa, que proporciona seguridad a diplomáticos estadounidenses en Irak, y le ordenó salir del país, después que sus empleados participaron en un tiroteo en Bagdad el pasado domingo.
Blackwater promueve la violencia, afirmó el Ministerio del Interior, al referir que los empleados abrieron fuego después de que morteros estallaron cerca de un convoy estadounidense, hecho que se saldó con ocho muertos y 22 heridos.
La víspera, la empresa estadounidense dijo que sus guardias sólo 'reaccionaron legal y apropiadamente a un ataque hostil' y negó haber recibido una notificación oficial sobre la suspensión de su licencia y la petición de salir del país.
Empero, el gobierno iraquí les acusó de 'disparar contra ciudadanos iraquíes en un parque de la capital, matando a civiles inocentes y un policía', según reportes de prensa conocidos en esta capital.
El gobierno iraquí buscará determinar si cada una de las compañías privadas de seguridad operan en cumplimiento con la ley de Irak, ya que 'todas las empresas deben respetar las leyes del país y la dignidad de los ciudadanos', afirmó al-Dabbagh.
Blackwater tiene su sede en Carolina del Norte, Estados Unidos, y es una de las al menos 28 compañías extranjeras de seguridad privada que operan en la nación musulmana, donde tiene a 744 empleados estadounidenses, 231 de un tercer país y 12 iraquíes.
El personal de ese tipo de empresas son considerados como civiles y aunque cuentan con protección ante procesos judiciales iraquíes, no tienen inmunidad de combate bajo las leyes internacionales si sostienen enfrentamientos.
En este marco, cuatro coches bomba estallaron este martes en Bagdad cobrándose la vida de 17 personas y causando heridas a otras 50, informaron fuentes de la policía.