Fotografía cedida por las Fuerzas de Defensa israelíes (IDF) que muestra a soldados de infantería de la brigada Givati durante unos ejercicios de entrenamiento en Israel durante estos últimos días. El gabinete de seguridad de Israel ha decidido declarar la Franja de Gaza como 'entidad peligrosa' después de la ocupación de Hamás y los continuos ataques con cohetes Kassam. (EFE)
El gobierno de Israel aseveró hoy a la franja de Gaza 'territorio enemigo' y anunció que le restringirá el suministro de electricidad y combustibles, lo que fue recibido por el grupo palestino Hamas como una declaración de guerra.
La decisión fue anunciada tras una reunión del gabinete de Seguridad del primer ministro israelí, Ehud Olmert, en respuesta a los ataques con cohetes caseros tipo Qassam que se han registrado en los últimos meses contra Israel desde el norte de Gaza.
En la declaración, reproducida por el diario local Jerusalem Post, Israel responsabilizó al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) de las actividades hostiles en la franja de Gaza.
Los ministros de Seguridad afirmaron que la franja de Gaza se transformó en un territorio enemigo después de que en junio pasado el grupo Hamas tomó el control político de la región y desplazó a la policía del presidente palestino Mahmoud Abbas.
Entre las sanciones aprobadas destacan restricciones de tránsito, la interrupción del suministro de energía y combustible a Gaza, donde vive más de un millón de personas, aunque los ministros decidieron no interrumpir el servicio de agua.
"Hamas es una organización terrorista que ha tomado el mando de la franja de Gaza y la ha convertido en territorio hostil", indicó la declaración israelí.
El ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, explicó que "el objetivo es debilitar a Hamas" y adelantó que prepara 'una operación militar a gran escala en la franja de Gaza", aunque no precisó si se trata de una invasión.
Israelíes y palestinos mantienen un conflicto desde hace décadas por la propiedad y el control de lugares considerados sagrados por ambas partes, entre ellos la ciudad de Jerusalén, que ambos pretenden sea su capital.
Pese a que en 2005 parecía estar cerca un acuerdo preliminar de paz, la situación de agravó con los cambios de gobierno tanto en Israel como en la Autoridad Nacional Palestina (ANP), cuyas elecciones fueron ganadas por Hamas, considerado un grupo terrorista.
