Los italianos se gastaron tres mil 500 millones de euros (unos cuatro mil 800 millones de dólares) en embellecerse y otras inversiones con fines amorosos durante 2006, lo que equivale a un 0.25 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) del país, según un estudio de Parship.it, portal europeo dedicado a las relaciones de pareja.
Los gastos se refieren esencialmente a cenas, aperitivos, ropa, viajes y cuidados de belleza en los que cada soltero italiano se gasta al año unos 690 euros (951 dólares), según los datos del estudio facilitados.
El 26.8 por ciento de los hombres y el 27 por ciento de las mujeres admitieron no haber tenido encuentros amorosos en el último año, mientras que otro 16.9 por ciento de los hombres y un 12.9 por ciento de las mujeres dijeron haber tenido más de veinte.
La mayoría de los entrevistados aceptan para la primera cita la posibilidad de comprar un vestido nuevo, ir a un restaurante, un bar o hacer un regalo de entre veinticinco y cien euros (entre 34.5 y 137.8 dólares), según el 51 por ciento de los hombres y el 26.6 por ciento de las mujeres.
El 46.7 por ciento de los hombres entrevistados dice que se gastaría hasta quinientos euros (690 dólares) durante la primera cita, mientras que el 1.4 por ciento se muestra dispuesto a superar los 750 euros (mil dólares).
El 13 por ciento de los jóvenes de entre 18 y 25 años paga la cuenta a medias, mientras que el 86.2 por ciento de los solteros mayores de 25 años declaró que paga él en la primera cita, situación que confirma el 83 por ciento de las mujeres entrevistadas.
El 15 por ciento de los encuestados está dispuesto a gastar dinero en la búsqueda de pareja por internet y el 4 por ciento se dirige a agencias matrimoniales.
El estudio se realizó con 766 personas, entre los 18 y los 60 años, de las cuales el 72.5 por ciento son solteros y el 27.5 por ciento separados, divorciados y viudos.
El 62 por ciento de los entrevistados tiene estudios de bachillerato y el 30 por ciento cuenta con un título universitario; en cuanto a las profesiones, las más representadas son los dirigentes, empleados, estudiantes, operarios y trabajadores autónomos.