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BUENOS AIRES, ARGENTINA.- El actor canadiense Jim Carrey aseguró al diario argentino Clarín que por fin encontró la paz porque ya sabe quién es después de una etapa de fuerte depresión provocada por la falta de identidad.
“Quiero ser una persona sabia, iluminada. Ahora ya sé quién soy, tuve un problema de identidad por mucho tiempo, estuve muy deprimido, pero ahora estoy bien, creo que encontré mi lugar en la vida”, dijo en entrevista que publicó ayer el matutino.
Afirmó que ahora está pintando y tiene mucha paz, por lo que quiere escribir un libro para niños y quizá otro más espiritual. “Hice mucha psicoterapia, lo que terminó ayudándome también como actor, por ejemplo a la hora de interpretar papeles oscuros”, explicó.
Carrey se encuentra en plena promoción de su más reciente película El Número 23, en la que interpreta a un hombre que termina atormentado por la intención de descifrar los mensajes que entraña esta cifra.
Considerado uno de los diez mejores actores cómicos de la historia de Hollywood, Carrey advirtió que, a diferencia de su personaje, él está en una etapa de tranquilidad.
“Creo firmemente que todo lo que te ocurre en la vida es creación de tu mente, puede no venir de la forma literal en que la pensaste pero viene. Yo me convencí a mí mismo de lo que quería ser, me lavé el cerebro, le lavé el cerebro al universo”, dijo.
El actor recordó que al inicio de su carrera “me convencí de que iba a cobrar millones de dólares por mi trabajo de actor, en 1995 me envié un cheque falso por diez millones de dólares y seis meses después recibí una oferta por esa cifra”.
