AGENCIAS
QUITO, ECUADOR.- El economista Rafael Correa rindió ayer juramento como nuevo presidente de Ecuador para el periodo 2007-2011, en una ceremonia realizada en la sede del Congreso ante la presencia de autoridades locales e invitados extranjeros.
?Ante Dios y ante el pueblo ecuatoriano juro cumplir el mandato que me otorgó la ciudadanía de Ecuador el 26 de noviembre?, sostuvo el nuevo gobernante.
Correa recibió después la banda presidencial de parte del mandatario saliente, Alfredo Palacio, para cumplir cuatro años de Gobierno, tras ganar la segunda vuelta electoral registrada en noviembre pasado con 56.69 por ciento de los votos.
Correa fue ministro de Economía y Finanzas de Palacio entre abril y agosto de 2005, cuando renunció a su cargo por las profundas diferencias que tenía con el gobernante, a quien incluso asesoró cuando éste se desempeñó como vicepresidente de Gutiérrez.
Horas más tarde, Rafael Correa, tomó juramento a los diecisiete ministros de su Gabinete, en una ceremonia especial en la ciudadela Mitad del Mundo, al pie del monumento que señala el paso de la línea ecuatorial.
En la ceremonia participó el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, que fue vitoreado por los más de cinco mil asistentes al acto en el monumento a la Mitad del Mundo, situado a unos 22 kilómetros al noreste de Quito.
Antes de tomar juramento a sus ministros, Correa recibió la Orden Nacional al Mérito en el Grado de Gran Collar, que se entrega a los presidentes al asumir el cargo.
Rafael Correa emitió un decreto ejecutivo para convocar una consulta popular, el 18 de marzo de 2007, sobre la instauración de una Asamblea Constituyente con plenos poderes que promulgue una nueva Carta Magna.
Los seguidores de Correa aplaudieron la decisión, pero abuchearon que el Ejecutivo remita copia de ese documento al Parlamento para su conocimiento y gritaron repetidamente ?fuera diputados?.
El Parlamento es una de las instituciones más desprestigiadas del país, según las encuestas, y muchos ecuatorianos partidarios de la Constituyente han manifestado su deseo de que esa Asamblea disuelva la Cámara para convocar nuevas elecciones parlamentarias.