Es esta la maravillosa receta para nunca enfermar y vivir feliz, bebiendo jugo de frutas y verduras, el uno purificador y el otro constructor, ambos se complementan y el cuerpo no puede vivir sano en la ausencia de alguno. Los jugos son el método más eficaz de introducir en el organismo inmensas cantidades de enzimas, antioxidantes, vitaminas, minerales y proteínas. Los néctares naturales dejan de ser ácidos pues se convierten en alcalinos al entrar en nuestro organismo, los jugos de verduras contienen cantidades inmensas de proteínas que el cuerpo requiere, con el balance adecuado de aminoácidos.
En alguna ocasión se le preguntó a un conocido fisicoculturista profesional cuál era su suplemento proteico ideal y mencionó que de las verduras tomaba más aminoácidos para la vida diaria que de ningún suplemento industrializado.
El único detalle, tanto de jugos de frutas como de verduras, es que deben ser hechos en casa y sin azúcar ni aditivos, pueden durar hasta ocho horas, de hecho hasta su consumo. Un jugo sometido a procesos industriales para poder enfrascarlo o enlatarlo se convierte en un ácido fuerte debido a que los procesos de pasteurización matan absolutamente todas las enzimas que la fruta o la verdura contiene, recuerde que una enzima no soporta más de 50 grados de calor.
Entonces pues, cuidando de consumir jugos recién hechos y nunca mezclar vegetales y frutas, debido a que tienen incompatibilidad enzimática, la vida nos sonreirá con salud, excelente figura, ausencia de grasa, etcétera.
Se debe tomar tanto jugo como se pueda, de tal manera que los mismos jugos laven el organismo de toxinas y además construyan y reparen todos los órganos y músculos que lo requieran, es indispensable en tiempo de calor consumir una gran variedad de jugos debido a que éstos aportan los nutrientes que el cuerpo requiere para impedir una deshidratación severa, además, si usted asiste al gimnasio es indispensable consumir jugos apropiados, como el de alfalfa, al terminar de entrenar, o el jugo de frutas durante el gimnasio, mismos que ya de por sí incluyen grandes cantidades de aminoácidos.
Recomiendo mucho el jugo de pepino con cáscara inmediatamente antes de ir a dormir, y el jugo de zanahoria con repollo y jengibre a media tarde usándolo como un verdadero anabólico de origen proteico, además, a media mañana el jugo de piña y el jugo de toronja, limón y naranja. Con las comidas, jugo de betabel con zanahoria, y nunca olvide el jugo de alfalfa tres o cuatro veces al día como un alimento existencial del cuerpo.
barshdorf@yahoo.com
Hasta la próxima...