La industria textil desocupará a varios de sus trabajadores durante el primer bimestre del 2008.
El Siglo de Durango
Se aproxima el año nuevo y también el desempleo. La Asociación de Industriales Textiles de Durango calcula que su planta laboral disminuirá entre un 30 y 50 por ciento para el primer bimestre del 2008.
Eduardo Quiñones Gallegos, presidente del gremio, explica que se trabaja con contratos temporales y es muy probable que para este cierre del 2007 varios de los empleados ya no serán requeridos.
La situación se torna difícil en esta época del año, a menos que se pacten pedidos importantes para enero y febrero, es imposible mantener a la totalidad de los obreros conforme lo expresa el entrevistado.
AMARGA REALIDAD
“Estamos cerrando con números positivos, por lo menos se han mantenido las ventas, pero creemos que no vamos a renovar algunos contratos. Enero y febrero son muy difíciles, a menos que uno amarre pedidos en diciembre para trabajarlos en el primer bimestre pero está muy difícil, no hay pedidos como en los periodos escolares para poder mantener al mismo personal”, adelanta.
Ante esta situación, el líder empresarial calcula que muchas de las agrupaciones del gremio se quedarán sólo con el 50 ó 70 por ciento de su planta laboral.
“Tenemos varios trabajadores temporales, aunque hay gente que ya lleva mucho tiempo con nosotros, hasta 15 años, ellos tienen contratos anuales y cada año se les renueva. La Ley Federal del Trabajo es muy clara en ese sentido, no pierden ningún derecho de antigüedad”, relata Quiñones Gallegos.
POTENCIAL
La Asociación de Industriales Textiles se integra por 20 empresas, en gran mayoría micros y pequeñas, quienes le dan empleo a 145 duranguenses.
Su dirigente hace referencia a la importante pérdida de empleos de la industria en la Comarca Lagunera, en donde grandes consorcios han cerrado sus puertas.
“Esto ha sido una regresión a nuestro progreso, porque si en La Laguna existían maquilas pues nosotros teníamos proveedurías de textileros en Gómez Palacio, Lerdo y Torreón y han cerrado esas tiendas. Esto ha provocado el decaimiento, que nosotros tengamos que buscar la maquinaria o las refacciones en la Ciudad de México u otras partes de la República”, lamenta el dirigente empresarial.
