La piel es un 'estuche de monerías'
La piel es un estuche que nos arropa y nos reguarda, es una fuerte carta de presentación porque es lo primero que la gente ve de nosotros.
La piel es considerado un órgano vital que tiene cuatro funciones principales:
Controlar de temperatura
Sin ella no habría regulación del calor y del frío. Hace frente a las variaciones climáticas del medio ambiente.
Proteger
Contra las agresiones del medio ambiente y los rayos UV.
Informar
Gracias a los millones de terminaciones nerviosas que se encuentran en ella. El estado de la piel es el reflejo de la salud, tanto física como mental.
Intercambiar
Ya que es permeable y deja pasar algunas sustancias activas que se pueden almacenar en la epidermis y dermis (que se aplican a través de cremas) y también puede expulsar otras, como el sudor, el sebo y las células muertas.
Tu tipo de piel
Básicamente se distinguen cuatro tipos:
Grasa. Se caracteriza por la secreción excesiva de sebo, la formación de obstrucciones en los poros y la proliferación bacteriana, que conduce al desarrollo de imperfecciones.
Signos: brillo, poros dilatados, puntos negros, espesor y textura irregular.
Seca. Tiene una película hidrolipídica deteriorada. Es decir, no tiene protección.
Signos: aspereza, enrojecimiento, malestar, tirantez.
Mixta. Es la combinación entre la piel grasa (frente, nariz y barbilla) y la seca (mejillas).
Signos: brillo en la zona "T" y aspereza en las mejillas.
Sensible. Reacciona ante el frío, calor, cansancio, estrés, productos de limpieza y cosméticos, etcétera.
Signos: Malestar, tirantez, irritación, sensación de incremento de temperatura.
La piel de ellos
Tanto en hombres como en mujeres, la piel juega el mismo papel; sin embargo, existen notables diferencias en su fisiología, debido, principalmente, a la influencia hormonal.
En la epidermis, por ejemplo, ellos tienen más vellosidad; en la dermis, es más alta la producción de sebo, pero es más firme y elástica, asimismo, hay más transpiración.
En pocas palabras, las principales diferencias entre la piel del hombre y la mujer radican en el grosor y la secreción sebácea, lo que ocasiona que los hombres resistan más el paso de los años, pero cuando los signos de envejecimiento se hacen evidentes, lo hacen de forma dramática.