La piel es es el órgano más extenso de nuestro cuerpo y el que tiene más riesgo de sufrir daños, aunque es capaz de dar señales de alerta sobre dichos malestares.
La diabetes, el sobrepeso, la obesidad y problemas de desnutrición como la anorexia, son enfermedades que además de afectar los órganos internos, tienen graves repercusiones en la piel.
Los daños causados por diversas enfermedades deben tratarse por separado, pues aunque comparten un mismo origen, son diferentes afecciones.
En conferencia de prensa, tres expertos en el cuidado de la piel explicaron los daños que pueden tener estas enfermedades en la dermis y a la vez cómo éste, que es el órgano más extenso de nuestro cuerpo, es capaz de dar señales de alerta sobre dichos malestares.
Cuando el azúcar se eleva
"El exceso de glucosa en el cuerpo predispone la aparición de infecciones en la piel, especialmente las relacionadas con hongos".
"Así mismo, cuando la diabetes es de larga evolución afecta a los vasos sanguíneos, el riñón, el corazón y a la piel", explicó la doctora Graciela Guzmán Perera, Presidenta de la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD).
Dado que los latinos son más propensos a la diabetes y en México cada vez se registran más casos (6.5 a 10 millones de personas diagnosticadas mas dos millones sin diagnóstico), es de suma importancia que se tengan cuidados especiales.
Dentro de las lesiones más comunes en la piel a causa de la diabetes, la experta enumeró el caso del Granuloma Anular Generalizado, el cual se caracteriza por manchas atróficas (la piel muy delgada) hiperpigmentadas, ovales o redondas.
También hay úlceras crónicas, infecciones en tejidos blandos y en los casos más severos, gangrena.
Las características de la piel diabética son: comezón, dermis engrosada y amarilla y uñas teñidas de este color.
"A veces ocurre la presencia de lesiones púrpuras, hay enrojecimiento y se forman ampollas diabéticas", explicó Guzmán.
Por lo regular, el paciente diabético manifiesta trastornos de sensibilidad en los pies y cuando llega a lastimarse casi no percibe dolor, lo cual pone en riesgo su salud y la de su extremidad.
En caso de ser víctima de estos síntomas, es necesario acudir al dermatólogo. Para ellos recomendó que para después del baño hay que secar completamente los pliegues del cuerpo (axilas, ingles, cuello) para evitar la humedad y posibles infecciones; no rascarse costras o lastimarse con las uñas u objetos punzo cortantes; si alguna parte de la piel se transforma en color púrpura, debe acudir al médico de inmediato y no esperar a que se convierta en color negro.
De presentar dolor, hinchazón y enrojecimiento de la piel acompañada de fiebre, se debe ir a urgencias médicas; si el padecimiento comienza a mostrar achaques en los pies, se sugiere visitar al ortopedista para protegerlos de posibles lesiones que pueden complicarse en úlceras o pérdida de extremidades; por último, tener cuidado al cortar las uñas, usar crema y jabón suaves.
Esos kilos de más
El salirse del peso ideal repercute no sólo en enfermedades cardiacas o diabetes, la piel sufre muchos cambios con el incremento acelerado o gradual de tallas.
Linda García Hidalgo, dermatóloga del Instituto Nacional de la Nutrición General, comentó que este desequilibrio en el peso impacta en las articulaciones y en la piel. "El aumento de masa corporal conlleva la liberación de hormonas masculinas y la aparición de acné, barba y alopesia o caída del cabello en las mujeres, estrías, y roce de pliegues en la piel".
Algunos de estos padecimientos son la acantosis nigricans y la insuficiencia vascular o várices.
La cantosis nigricans se localiza principalmente en los pliegues (cuello, axilas, ingles) y salientes óseas.