Valentina Tereshkova viajó al espacio el 15 de junio de 1963.
"Si tuviera dinero, viajaría otra vez al espacio aunque sea como turista, y también volaría a Marte, incluso con billete sólo de ida", declaró Valentina Tereshkova, la primera cosmonauta de la Historia, que hoy celebra su 70 cumpleaños.
El 15 de junio de 1963, esta intrépida mujer rusa viajó al espacio a bordo de la nave soviética Vostok-6 y regresó a la Tierra 71 horas después convertida en una heroína.
Tereshkova, que tenía 26 años entonces, dio 48 vueltas a la Tierra en el incómodo habitáculo de su nave, en el que apenas se podía mover.
Tras romper cerca de veinte años de "silencio con la prensa", Tereshkova reveló algunos secretos de su histórica misión espacial.
En particular, se supo que el primer vuelo al espacio de una mujer pudo terminar en tragedia, ya que la cosmonauta corrió el riesgo de nunca regresar a nuestro planeta.
"Se produjo un error en el programa de vuelo que condujo a que el aparato, con cada nueva vuelta, en vez de acercarse a la Tierra, se alejaba", relató.
Precisó que sólo en la segunda jornada de su misión se logró subsanar el fallo en el programa desde el Centro de Control de Vuelos de Moscú y devolver la nave a la órbita prevista.
Nacida en el seno de una familia campesina, a la edad de 17 años Tereshkova ya trabajaba en una fábrica textil en Yaroslavl y en sus horas de ocio practicaba paracaidismo en un aeroclub de esa ciudad, a unos trescientos kilómetros al norte de Moscú.
Con un bagaje de 163 saltos con paracaídas, en 1962 entró a formar parte de un grupo de cinco candidatas a cosmonauta, organizado por orden del entonces líder soviético, Nikita Jruschov.
El jerarca, famoso por su zapatazo en las Naciones Unidas, soñaba con que una soviética fuera la primera mujer que viajara al espacio para continuar la senda marcada por Yuri Gagarin.
"Permítame llamarle simplemente Valentina, Valia", dijo Jruschev a Tereshkova durante una conversación radial con Vostok-6.
"Nos sentimos llenos de orgullo por tener a una de nuestras jóvenes en el espacio", declaró sin poder contener la emoción, como quedó registrado para los anales de la Historia en los documentales de la época.
A su regreso a la Tierra, Tereshkova, aunque formalmente siguió siendo parte del destacamento de cosmonautas de la URSS y fue la única mujer que obtuvo el grado de general de Aviación, se dedicó a variadas actividades públicas.
Durante casi dos decenios fue presidenta del Comité de las Mujeres Soviéticas y a fines de los años 80 encabezó la Unión de las Sociedades de la Amistad de la URSS con los pueblos extranjeros.
Con motivo de su cumpleaños, Tereshkova fue recibida por el presidente de Rusia, Vladímir Putin, en su residencia de Novo-Ogariovo, en las afueras de Moscú.
"Su vuelo espacial ha sido y sigue siendo objeto de orgullo del pueblo soviético y ruso", dijo el jefe del Kremlin a Tereshkova, a quien regaló un ramo de flores y un cuadro, obra de la pintora Natalia Tkachenko.