Carlos Eduardo Rico hizo vibrar el Teatro del Pueblo de la Expo Feria Gómez Palacio con sus ocurrencias. (Fotografía de Ángel Padilla)
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Carlos Eduardo Rico se presentó como pocos lo han hecho no solamente por el lleno total del lugar, sino también por la puntualidad con la que el comediante inició su show en el Teatro del Pueblo de la Expo Feria Gómez Palacio, sorprendiendo al público que lo recibió con un fuerte aplauso y con la disposición de divertirse.
El comediante arribó al recinto a las 10:20 de la noche con una actitud sencilla y accesible con las personas que querían saludarlo al momento de descender del vehículo. “Siempre lo hago, y le pido a Dios que entre mejor me vaya más lo pueda hacer”.
El espectáculo dio inició a las 23:03 horas. Acompañado de tres músicos y vestido de pantalón negro y saco azul, Carlos Eduardo agradeció al público su asistencia aclarando que esta vez no venía a atacar a las mujeres sino a defenderlas. “Esta vez las voy a defender por que sé todo lo que hacen para estar guapas para los hombres, aunque no las valoremos”; los aplausos de las damas no se hicieron esperar, por lo que las primeras historias de la noche serían sobre los tratamientos de belleza.
El público no podía evitar el carcajearse ante las caras y movimientos del humorista que parecía tener muy bien estudiadas a las mujeres y sus actitudes, y los caballeros solamente asentían con la cabeza.
El matrimonio fue el siguiente tema a desarrollar, primero entró en la etapa de la luna de miel “está la muchacha toda avergonzada en la cama y se tapa con la sábana, y el hombre muy sexy con una toalla amarrada le pregunta ‘¿te gusto?’, y aquella nada más responde ‘sí mi rey’. Pero diez años después de casados la misma mujer ya no siente pena por lo que no se tapa y tiene dos grandes cosas colgando para los lados de la cama y al hombre ya ni le queda la toalla con semejante panza y voltea y le pregunta a su esposa: ‘¿todavía te gusto vieja? Y aquella nada más le responde ‘¿y yo a ti?’”..
Continuó haciendo una comparación entre la forma antigua y moderna de conquistar a una mujer “antes le llevabas serenata con mariachi y le cantabas Gema, mientras que ahora nada más van y le cantan ‘Nadie me quiere todos me odian, mejor me como un gusanito...’, ¿qué es eso? Por lo menos fuera La Boa y no un triste gusano”.
Chistes de borrachos, de table dance y de infidelidad fueron de los que más risotadas provocaron a los asistentes, quiénes solamente se torcían y no dejaban de aplaudir.
A la media noche una pareja del público se retiraba por lo que el artista no dejó pasar la oportunidad para hacer bromas sobre los comediantes y cómo es que hacen para mantener entretenido al público. “No es fácil hacer chistes, pero no se vayan, ¿quién los quiere a ellos tan lindos?”, así que prefirió dar entrada a su Patiño (Ricardo Mansur) para mostrar al público un espectáculo de carpa como en los tiempos de antes dando cátedra de los diferentes idiomas que habla (inglés, francés y náhuatl).
“¿Usted sabe hablar en francés? ‘Por supuesto al principio le pones el artículo le y al final le agregas una e. ¿Cómo se dice mesa? ‘le mese’ ¿y silla? ‘le sille’, ¿y papá? ‘le pape’, ¿y mamá? ‘le espose del pape’”.
El artista no solamente contó historias chistosas, también hizo imitaciones de diversos cantantes y por supuesto no podía escaparse el divo de Juárez, Juan Gabriel, a quién empezó imitándolo con la ya tan conocida caída del interprete; continuó con Emmanuel “éste parece que siempre le anda del baño”. Tampoco podía faltar el Príncipe de la Canción José José “que siempre se le olvida quitarle el gancho a la ropa”, y con quién sorprendió el comediante fue con la imitación de Tin Tan “que a mí me parece el mejor cómico que ha dado México”.
Cerca de la una de la madrugada, Carlos Eduardo se despidió del público lagunero agradeciendo nuevamente su presencia, por lo que la gente no dudó en despedirlo con una gran ovación de pie que conmovió al artista que no dejó de posar para las cámaras de la gente.
