Ana Gabriela Guevara, la destacada atleta mexicana que sigue dando la cara por su país en cualquier competencia internacional en donde se presente, sean Panamericanos o en los mismos Juegos Olímpicos. (AP)
Las atletas mexicanas obtuvieron el 59 por ciento de las medallas para la delegación nacional en los Panamericanos 2007.
Ellas se cansaron de las excusas. “Perdimos pero aprendimos la lección”, “son cosas de futbol”, “es que los jueces nos quieren y por eso nos descalificaron por ser mexicanos”, “no me marcaron los puntos”, “los penales son un volado”.
Después de cada derrota de cualquier atleta mexicano siempre se busca un tercero como responsable del trágico destino. Sin embargo la mujeres empezaron a demostrar que esas frase en ellas no tenían cabida.
Y la muestra más fehaciente fue los pasados Juegos Panamericanos de Río de Janeiro 2007, en donde las chicas mantuvieron a flote el hundimiento eminente de la delegación mexicana en el medallero.
La participación de las mujeres mexicanas fue destacada: de las 18 medallas de oro, ellas lograron 10, a pesar de ser minoría en la delegación. De hecho, la mayor medallista de los Juegos Panamericanos fue la clavadista Paola Espinosa, quien ganó tres medallas de oro y una de plata.
Las taekwodoines Alejandra Gaal, Iridia Salazar y Maria del Rosario Espinosa se subieron contra todos y obtuvieron una presea dorada. La pequeñita Carolina Valencia levantó con la gloria, mientras que Vanesa Zambotti, como buena mujer del norte, no se echó para atrás y consiguió su sueño dorado.
Y con gran valor Romary Rifka se impuso con una determinación en el salto de altura y una memorable actuación de Ana Guevara, levantando su salud con un brazo mas fuerte que nunca para luego llevar al equipo de relevos de 4x400 a una emocionante medalla de plata.
Las mujeres se trajeron un 59 por ciento de las medallas conseguida, este porcentaje hubiera sido mayor de no haber sido por el equipo de canotaje que le dieron un impulso final para que México se quedará en el quinto lugar del medallero.
Ahora ellas tienen la palabra, sólo falta que los hombres se dejen de complejos y excusas, para que el deporte mexicano realmente llegue a levantarse.
Una Actuación ‘real’
El desempeño de la delegación mexicana encajó apenas en el escenario “real”, luego de la obtención de 73 medallas, de las cuales 18 fueron de oro.
Al hacer un análisis final sobre la actuación del contingente en la citada justa, se determinó que la cosecha se inscribió a lo esperado, pues se preveía la obtención de entre 14 y 19 metales dorados. El subdirector general de Calidad del Deporte, Juan Manuel Rotter, señaló en conferencia de prensa que, desde ahora, el objetivo será enfocar el esfuerzo a los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 y Londres 2012, y de paso en los Panamericanos Guadalajara 2011.
Acompañado por el titular de Conade, Carlos Hermosillo; el del COM, Felipe Muñoz y de la Codeme, Alonso Pérez, Rotter destacó la aportación del canotaje, con siete preseas totales, cinco de oro, y de los clavados, con seis, tres de ellas áureas.
En números, México se ubicó en la quinta posición general con 18 medallas de oro, 24 de plata y 31 de bronce, para un total de 73, más cerca de Colombia que fue sexto (14/21/1348) que del cuarto sitio que ocupó Canadá (39/43/55137).
El balance no fue mejor que el de San Domingo 2003, donde se lograron 20 oros. El atletismo fue la disciplina de mayor aportación con 14 totales (tres de oro, siete de plata y cuatro de bronce, Por género, las mujeres lograron 10 doradas, 17 de plata y 15 de bronce, para 42, y no fue sino hasta el final cuando los hombres cerraron con todo para sumar ocho, siete y 16, respectivamente, para 31.
En forma individual, la clavadista Paola Espinoza se colgó cuatro metales, tres de los cuales fueron de oro y una de plata, seguida por el canoísta Manuel Cortina, con tres doradas.
Se informó que además de la entrega de estímulos económicos a los atletas que lograron medalla, la próxima semana comenzará el pago de bonos a los entrenadores cuyos dirigidos se colgaron metales.
Los entrenadores devengarán 40 mil pesos por medalla de oro, 20 mil tentativamente por un segundo metal áureo y se estudia la cantidad para los que lograron un tercer oro.
Buenos augurios
La delegación mexicana que participó en los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro ganó 18 metales, de los cuales 17 fueron en deportes olímpicos, a diferencia de los Juegos del 2003, en Santo Domingo, donde se consiguieron 20 oros, pero sólo 12 de esa categoría.
Eso que deja un buen sabor de boca entre los dirigentes mexicanos con miras a Beijing 2008, aunque el pronóstico inicial de regresar con 20 oros no se haya cumplido.
“Es extraordinario, muy bueno. De las 18 medallas de oro, 17 son de federaciones olímpicas. Eso es fundamental para lo que queremos en Juegos Olímpicos”, mencionó el titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Carlos Hermosillo.
Con estos 17 oros se observó un crecimiento con respecto a Santo Domingo 2003, pues se ganaron preseas en disciplinas que no pudieron conseguirlo hace cuatro años: halterofilia, judo y canotaje. Esta última fue una de las revelaciones de la delegación mexicana con cinco medallas. Incluso superó el atletismo, donde el tema de la marcha fue un punto negro.
“La necedad de la marcha, que tanto insistimos, vino a darse lo que ya habíamos comentado”, afirmó Hermosillo refiriéndose a que la Federación Mexicana de Atletismo (FMA) dejó en México a uno de los mejores exponentes en 20 kilómetros, Éder Sánchez, y en su lugar llevaron a Érick Guevara y Cristian Berdeja, descalificados.
La única prueba de fondo que dio medalla de oro fueron los 10 mil metros de David Galván, quien derrotó al gran favorito, el local Marilson Dos Santos.
A pesar de lo positivo, también se vivieron momentos agrios en la delegación mexicana. Uno de ellos fue la pérdida del bronce histórico en gimnasia artística por equipos, luego de que el presidente de la Federación Mexicana de Gimnasia, Alejandro Peniche, dejó que una atleta que estaba registrada como entrenadora compitiera.
Para el titular de la Conade, hay que reforzar este tipo de descuidos, inlcuso en Beijing 2008. “Me voy contento. Sé que podemos mejorar, estamos claros en lo que tenemos que hacer. Ya nos preocupa trabajar desde ya los Olímpicos y Panamericanos 2011”, afirmó.
