Las cicatrices no amenazan la salud física de las personas, pero hay que estar alerta ya que muchas son dolorosas o causan comezón.
MÉXICO, D.F.- Un asunto de alta prioridad para hombres y mujeres por igual es la eliminación de cicatrices, algunas de las cuales son producto de cortadas accidentales u operaciones quirúrgicas. Se dan casos en que la gente sufre en la soledad, pues se aísla cuando estas huellas afean su rostro o alguna otra parte visible del cuerpo.
Sobre este delicado tema, la doctora María Isabel Arias, integrante de la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD), señala que siempre hay que cuidar la evolución de las cicatrices.
La especialista dice que hay ocasiones en que se da una cicatrización anormal, que afecta alguna zona del cuerpo limitando su función, por ejemplo, si es extensa en el cuello o manos impide movimientos y funcionalidad.
Agrega que por lo general, las cicatrices no amenazan la salud física de las personas, pero hay que estar alerta ya que muchas son dolorosas o causan comezón. Las cicatrices pueden afectar de manera importante la autoestima, sobre todo cuando están en cara, brazos o pecho.
La doctora Arias dice que se debe tener cuidado con el uso de productos milagrosos, como los remedios caseros, ya que muchas veces no son la mejor opción para tratar las cicatrices. Los tratamientos para desvanecerlas son realizados únicamente por el médico especialista, subraya.
Tipos de cicatrices * Normales: No presentan molestia física o visual, son las que no duelen y casi no se ven
* Aróficas: Aparecen como zonas deprimidas en la piel, están hundidas. Presentan coloración rosada o blanquecina, debido a la pérdida o degeneración de colágena y elastina.
* Hipertróficas: Son lineales si son consecuencia de una cirugía. Son de forma irregular debido a postraumatismo o quemadura y las hay desfigurantes y que ocasionan contracturas y comezón.
* Queloides: Son firmes, los bordes están demarcados, pero son irregulares. La superficie puede estar adelgazada y a veces ulcerada. Son de coloración rosada, violácea o pigmentada, dan comezón, son dolorosas y con mayor sensibilidad.
La especialista llama la atención hacia "el caso de las mujeres embarazadas, en quienes hay que mantener cuidados precautorios y evitar cirugías innecesarias, ya que algunas cicatrices pueden aumentar durante esta etapa debido a la influencia hormonal y pueden volverse queloides".