Acusado de asesinar con un cuchillo a un joven con el que peleó, Héctor Rafael Gaytán García, de 20 años, recibió el auto de formal prisión por el juez segundo del Ramo Penal en Gómez Palacio.
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Auto de formal prisión por el delito de homicidio calificado, dictó el Juzgado Segundo del Ramo Penal a Héctor Rafael Gaytán García, acusado de asesinar a Juan Antonio Ávalos López, en hechos ocurridos en la colonia 15 de Mayo. La propia madre del inculpado lo entregó a las autoridades al enterarse de lo ocurrido el mismo día.
La juez penal por ministerio de Ley, María de Lourdes Mares Cisneros, informó que el inculpado ya se encuentra internado en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de esta ciudad, donde se le notificó su formal prisión.
Como se dio a conocer en este medio, la Agencia Investigadora del Ministerio Público de Delitos contra la Vida y la Salud Personal, consignó desde el lunes 16 a Gaytán García al Juzgado Segundo en materia Penal por el delito de homicidio calificado.
Gaytán García, de 23 años, manifestó en su declaración ministerial haber actuado en defensa propia. Ante esta situación, el representante social advirtió que la defensa del detenido aportaría elementos que corroboren la versión de haber sido atacado por dos personas, entre ellas el ahora occiso.
La Averiguación Previa que se integró en el caso, incluye las declaraciones de testigos de los hechos, quienes manifiestan haber visto sólo a Héctor Rafael Gaytán y a Juan Antonio Ávalos.
Como se recordará, Ávalos López falleció en las instalaciones de la Cruz Roja, a las cinco de la mañana del domingo 15 luego de recibir tres heridas con arma blanca: una en el lado izquierdo del pecho, otra en la mejilla izquierda y la tercera en el cráneo. La primera de las lesiones le causó la muerte al provocarle una hemorragia interna.
Luego de los hechos, a las seis de la mañana del mismo domingo, la señora Ismaela García Vázquez, de 46 años de edad y madre de Gaytán García, lo entregó a los agentes de la Policía Preventiva Municipal tras enterarse que había participado en una riña y lesionado a otra persona, además de observar que su hijo también resultó lesionado en una mano.