Los presuntos malhechores iban con uniformes de la AFI y PFP; portaban chalecos antibalas, cascos y rifles de alto poder. Estuvo a punto de registrarse una balacera entre un comando armado de presuntos delincuentes y la Policía Municipal, después de que los primeros “levantaron” a dos.
Un comando armado conformado por más de 20 sujetos encapuchados, con vestimentas apócrifas de la Policía Federal Preventiva (PFP) y de la Agencia Federal de Investigación (AFI) portando rifles de alto poder, de los que usa el Ejército, irrumpió en un domicilio y “levantó” a dos personas; posteriormente, cuando agentes municipales detectaron a una de las cuatro camionetas de los delincuentes, la detuvieron pero en cuestión de minutos llegaron los otros tres vehículos y frente a frente se apuntaron con sus armas y al final el Comandante Operativo de la Policía Preventiva dio la orden a su personal de que se retirara y dejara ir a los falsos agentes.
La madrugada del lunes, enfrente de la Soriana Madero, se registraron los hechos, donde testigos vieron cómo los agentes de la Policía Municipal apuntaban con sus pistolas y uno que otro rifle a los presuntos delincuentes que portaban fusiles G-3 y Mini-14, superiores a los de los preventivos, pero después de varios minutos de afrenta, una orden del Comandante Operativo se escuchó diciendo: “Vámonos, para que no se haga el desm... aquí”.
El lunes por la tarde se reunieron agentes de la Unidad Contra el Crimen Organizado (UCCO), del Centro de Inteligencia y Análisis Táctico (CIAT) con elementos de las Dirección Municipal de Seguridad Pública (DMSP) para estudiar la situación y observar en las cámaras del Sistema Municipal de Monitoreo (Simmon) qué habían captado.
El subdirector de la Dirección Estatal de Investigación (DEI), Gustavo Rivera Ramos, confirmó los hechos y comentó que se está investigando al respecto pero que todavía no se sabe nada de los presuntos delincuentes.
CRÓNICA DEL DELITO
De acuerdo con las primeras investigaciones y declaraciones obtenidas, los hechos se registraron en las primeras horas del lunes en un domicilio ubicado por la calle Ismael Lares, del fraccionamiento Domingo Arrieta, cuando varios sujetos armados llegaron a bordo de una camioneta Suburban, una Ram y dos al parecer tipo Durango y además de llevarse joyas, llaves de vehículos, “levantaron” a dos señores, uno de ellos que estaba en silla de ruedas.
Minutos más tarde, cuando los elementos de la Policía Municipal hacían un recorrido por las calles posteriores a la discoteca Cyclon’s, vieron a un sujeto encapuchado subirse a la Suburban y salir a toda velocidad hacia el bulevar Domingo Arrieta y emprendieron la persecución, logrando detenerlo a la altura de Soriana Madero; sin embargo, el conductor no se quiso bajar y manifestaba que era agente de la PFP, por lo que los municipales llamaron refuerzos hasta sumar cerca de 18 elementos, que pretendían detener al sujeto si no se identificaba.
En eso llegaron las otras tres camionetas de los delincuentes y se bajaron alrededor de 20 sujetos con insignias de la PFP, de la AFI y otros con la leyenda “Police”, armados con rifles G-3, de uso exclusivo del Ejército y con Mini-14, de las que usan calibre 2.23, además de portar cascos y chalecos antibalas, y les ordenaron a los municipales que bajaran las armas.
Los policías no dejaron las armas y les exigían que se identificaran pero los presuntos delincuentes tampoco dejaban de apuntarles, poniéndose el ambiente muy riesgoso, pues mientras se amenazaban con sus fusiles ambos grupos, uno de los encapuchados empezó a tomar fotografías de los agentes y anotó los números de las unidades municipales.
En un momento dado, el Comandante Operativo de la corporación municipal sostuvo un intercambio de palabras con uno de los encapuchados y de pronto les dijo a sus policías a través de una clave: “100-30, vámonos para que no se haga el desm... aquí” y se retiraron, dejando ir a los presuntos delincuentes.
Los policías municipales en ese momento pensaron que la orden de dejarlos ir “100-30” fue porque en verdad se trataba de agentes de la PFP y de la AFI; sin embargo, en menos de una hora recibieron el reporte del “levantón” de dos personas del fraccionamiento Domingo Arrieta y tras acudir al apoyo se percataron de que los plagiarios eran los mismo sujetos fuertemente armados a los que habían tenido enfrente hacía unos minutos.
Piden municipales más garantías
En torno a los hechos suscitados el pasado lunes en los que varios agentes de la Policía Municipal se tuvieron que enfrentar a un grupo con armas de alto calibre, de uso exclusivo del Ejército, y ellos apenas con sus pistolas .38 y uno que otro rifle, manifestaron que necesitan más garantías pues es imposible sostener esta situación con gente que los supera con vehículos y armamento.
Ayer, El Siglo de Durango entrevistó a varios policías preventivos en torno al enfrentamiento con delincuentes fuertemente armados; algunos estuvieron presentes en el lugar de los hechos y otros se enteraron de los sucedido, comentando que sus familias están preocupadas ya que no cuentan con las garantías suficientes, cuestionando al titular de la corporación que si va a tomar medidas de protección para los agentes que fueron fotografiados por los delincuentes.
