Agencias
VILLAHERMOSA, Tabasco.- El secretario de Seguridad Pública de Tabasco, Francisco Fernández Solís, sobrevivió ayer a un atentado perpetrado por un grupo de sicarios que le disparó más de 140 balas, cuando se disponía a abordar su camioneta, al salir del hotel en que reside.
El secretario de Gobierno, Humberto Mayans Canabal, dijo que Fernández Solís, de 70 años, sufrió lesiones en el ojo, brazo derecho y cuello, debido a las esquirlas de las balas que dispararon los agresores y añadió que el mando policiaco se recupera en el hospital de la 30 Zona Militar.
?Sus condiciones físicas son estables, por lo que su vida no corre riesgos?, aseguró.
El funcionario apuntó que en el ataque, presuntamente cometido por cuatro personas que viajaban a bordo de una camioneta Mitsubishi Outlander, murió instantáneamente el chofer de Fernández Solís, el sargento José de la Luz Pérez Mayo, mientras que su auxiliar Leobardo Eugenio Acosta Gutiérrez, resultó herido.
El procurador de Justicia, Gustavo Rosario Torres, informó que la camioneta Suburban que se disponía a abordar el titular de la SSP, recibió 104 impactos de bala, 75 de ellos calibre .225 milímetros de ametralladora R-15 y el resto, correspondientes a una pistola calibre .38 súper. Además, en las paredes del hotel se identificaron 43 impactos más.
Los hechos ocurrieron a las 8:40 horas, en una salida lateral del Hotel Calinda Viva, en la Calle Juárez, en la zona hotelera de Villahermosa.
Pedro Reséndez, coordinador de asesores del Gobierno del estado, señaló que poco antes del atentado, había acompañado a Fernández Solís para efectuar la caminata que realiza diariamente para ejercitarse en el Parque Tomás Garrido, y a la que fueron acompañados por dos guardaespaldas.
Después, según testigos, Fernández regresó al hotel, donde desayunó con el subsecretario de Prevención y Readaptación Social, Adrián Gutiérrez y su secretario particular, Alonso Altamirano. Fue al momento de abandonar ese desayuno cuando ocurrió el incidente.
En una conferencia de prensa ofrecida seis horas después del atentado, Mayans Canabal y Rosario Torres, dijeron que el trabajador de un estacionamiento era el único detenido, en calidad de testigo. También admitieron no contar con rastros de los agresores y que tampoco podían especular sobre el motivo y autores.
El procurador Gustavo Rosario, admitió que un hombre identificado como Marco Preciado Gómez, fue detenido a la altura del kilómetro 16.5 de la carretera federal Villahermosa-Macuspana, cuando viajaba a bordo de una camioneta, sin embargo, en un comunicado, la delegación de la PGR en Tabasco deslindó del atentado al sujeto, quien fue acreditado como elemento adscrito a la Base de Intercepción Aérea ubicada en Chetumal, Quintana Roo.