Tres adolescentes de 16 y 17 años fueron linchados por una turba de pobladores que les acusaban de integrar pandillas que cobrar extorsiones y atemorizan esta localidad.
"Los agarraron en el parque y los trajeron a golpes unas diez cuadras, hasta llegar acá, donde los quemaron vivos por que los sindican de ser pandilleros", dijo a la AP el oficial de policía Elías Rodríguez.
Los tres adolescentes, uno de 16 años y dos de 17, llegaron al pueblo para comprar película fotográfica para retratar al tío de uno de ellos, refirió Gonzalo Pirir, padre de José Pirir uno de los linchados.
"Qué de malo, qué de robo hizo mi hijo... pero Dios sabe lo que hace y hay una justicia de Dios", se lamentaba Pirir, a cuyo lado se encontraba su esposa desconsolada apreciando la escena.
Los cadáveres, aún humeantes, yacían en un terreno vacío que la población ha utilizado como basurero en tiempos recientes. San Juan Sacatepéquez es un pueblo mayoritariamente indígena ubicado a unos 15 kilómetros al noroeste de la capital.
En esta comunidad, informaron varios comerciantes, las pandillas extorsionan a los dueños de negocios. Quien no paga el denominado "impuesto" corre riesgo de que le ataquen e incluso maten los pandilleros.
El linchamiento ocurre casi dos meses después de que vecinos de la cercana localidad de Cerro Alto, quemara vivos a otros dos supuestos delincuentes.
El hecho motivó a que los delincuentes juveniles y miembros de pandillas, así como cualquier joven que no quisiera ser señalado de delincuente se presentara ante los líderes de la comunidad para demostrar su voluntad de no delinquir.
El domingo, los guatemaltecos votarán para elegir al próximo presidente de Guatemala entre un candidato que ofrece "mano dura" contra la delincuencia y otro que considera que para acabar con la violencia hay que crear empleos.
