El presidente Felipe Calderón dijo que es posible cambiar a México siempre que exista voluntad política de los actores involucrados.
El mandatario dijo estar a favor de una reforma electoral.
El presidente Felipe Calderón dijo que es posible cambiar a México siempre que existan acuerdos y voluntad política entre los actores involucrados y llamó a los legisladores a construir un diálogo para concretar las reformas que el país necesita.
Lo anterior, durante un mensaje ofrecido en Palacio Nacional con motivo de su primer Informe de Gobierno, documento que no leyó ante el Congreso de la Unión el sábado primero de septiembre y que en esta ocasión sí incluyó los honores a la investidura presidencial y el que Calderón portara la Banda Presidencial.
Al abrir su mensaje, el titular del Ejecutivo, dijo que participó el sábado en una ceremonia “respetuosa y sobria de acuerdo con los nuevos tiempos”.
Sostuvo que el formato del Informe tiene que cambiar y debe permitir el diálogo y el debate sin los cuales no se entiende la democracia.
Entre los asistentes al acto se encontraban los gobernadores del PRI, el Gabinete Legal y Ampliado, los titulares de la CNDH, José Luis Soberanes y el consejero presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, algunos diputados y senadores y sólo dos gobernadores del PRD –Zeferino Torreblanca, de Guerrero y Juan Sabines, de Chiapas-.
El mensaje, que tuvo una duración aproximada de una hora y 20 minutos, incluyó los temas de Estado de Derecho y seguridad; economía; oportunidades sociales; recursos ambientales y democracia efectiva, entre otros.
El mandatario destacó sobre seguridad pública, que el narcotráfico y crimen organizado siguen siendo la principal amenaza de la paz de la población, “la lucha contra el crimen organizado sigue adelante”, señaló.
En el rubro económico dijo que es necesario impulsar la inversión para generar el número de empleos que requiere el país.
Se comprometió a generar finanzas públicas sanas que no dependan directamente del petróleo ya que ha disminuido la producción diaria de crudo en las últimas semanas.
Sobre educación dijo que es necesario impulsar una reforma que impulse una mayor calidad en la educación y con ello preparar mejor a los jóvenes para igualar oportunidades en el país.
El mandatario informó que su Administración ha centrado su estrategia social con el objetivo de igualar oportunidades, por lo que las políticas públicas no sólo deben mantenerse sino fortalecerse.
Advirtió que “el tiempo se agota” y aprovechó para urgir a la aprobación de las reformas que siguen pendientes en el Poder Legislativo, a quienes, de nueva cuenta, convocó al diálogo.
“Todos sabemos que los recursos que tiene el Estado no alcanzan, son insuficientes para atender estas demandas; por eso es necesario que aportemos todos, cada quien en la medida de su capacidad, que aportemos todos y en especial quienes más han recibido”.
Ante unas 3 mil 500 personas el mandatario dijo estar a favor de una reforma electoral.
“Soy partidario de que se fortalezca la fiscalización, de disminuir los recursos a las campañas, de hacer campañas más cortas y de mantener la equidad. Seré respetuoso de lo que los partidos decidan, hago votos por que la imparcialidad exigida al presidente sea igualmente exigida a todos los funcionarios de Gobierno”.
Por otra parte, Calderón criticó las decisiones del Congreso estadounidense que exacerban el maltrato y generan actitudes vejatorias contra los mexicanos indocumentados en ese país. Además rechazó la construcción de un muro fronterizo entre México y Estados Unidos.
El mensaje del mandatario, le fue reconocido con más de una veintena de aplausos a lo largo de poco más de una hora, aplausos provenientes de su Gabinete, legisladores del PAN, alcaldes de extracción panista y presidentes del mismo instituto político en los estados, así como invitados que ocuparon las tres zonas divididas en grada, plateada y verde.
Calderón concluyó su discurso con el grito de ¡Viva México!
