AP
QUITO.-Diversos sectores del país rechazaron el miércoles los disturbios y la violencia desatada por manifestantes en contra del Congreso para exigirle el apoyo para una consulta popular que abra paso a una Asamblea Constituyente de plenos poderes.
El presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Néstor Herrera, señaló que "en las manifestaciones masivas no prevalece la razón y son proclives a infiltraciones... con agresiones que nos vuelven a poner en el sendero de la violencia, que desde hoy queremos borrar".
En un comunicado, afirmó que los ecuatorianos no quieren vencedores ni vencidos, quieren la demostración de que somos capaces de comunicarnos serenamente.
Convocó a los poderes del Estado a respetar el deseo ciudadano de cambios profundos y pidió a los mandatarios que "demuestren ser capaces de ponerse de acuerdo en los lineamientos fundamentales".
Miles de manifestantes sitiaron el martes el edificio del Congreso, que para ese momento ya se encontraba sin diputados y personal, superaron barreras policiales e ingresaron a sus patios en medio de actos de violencia que dejaron cerca de media docena de personas con heridas menores.
La protesta buscaba presionar para que los diputados aprueben una consulta popular que permita llamar a una Asamblea Constituyente de plenos poderes propuesta por el presidente Rafael Correa, quien ha justificado la iniciativa aduciendo que el modelo del estado vigente en Ecuador está colapsado.
El presidente del Congreso, Jorge Cevallos, dijo al canal 4 de televisión que "queremos tranquilidad para el país... pedirle al Presidente que nos sensibilicemos con el país, el congreso lo ha llamado permanentemente al diálogo, insisto en el diálogo".
Expresó que el camino para resolver las diferencias políticas no es "insultando, queriendo en su momento ... llegar a la agresión física".
No descartó, en caso de nuevos actos de violencia en contra del Congreso, que los diputados puedan realizar sus sesiones en otras ciudades como Guayaquil, Manta y Portoviejo porque tiene la obligación de proteger la integridad física de los legisladores.
Añadió que "con amenaza de muerte todos los días no podemos llegar a ningún lado".
El secretario de la administración, Vinicio Alvarado, advirtió que "cuando hay una demanda social incontenible, creo que no puede haber fuerza pública que pueda contenerla".
Agregó que los hechos de la víspera "son alertas que hay que tomar en cuenta para tomar las respectivas medidas".
La vocera del gobierno, Mónica Chuji, señaló que el gobierno defenderá la libertad de expresión de la ciudadanía pero que el gobierno ratifica "su más enérgico rechazo a cualquier forma de violencia".