Una pancarta con la imagen de la ex candidata presidencial franco-colombiana Ingrid Betancourt fue desplegada en Bruselas, Bélgica. (EFE)
Cumple la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt dos mil días en cautiverio.
El presidente francés Nicolas Sarkozy y los hijos de Ingrid Betancourt presionaron el miércoles para que el Gobierno colombiano y las FARC sellen un acuerdo humanitario que facilite la liberación de todos los secuestrados en Colombia.
Al cumplirse el miércoles los dos mil días de cautiverio de Betancourt, ex candidata presidencial en Colombia, Sarkozy se comunicó con su familia y exhortó a las FARC a que “hagan, sin demora, los gestos necesarios para posibilitar un acuerdo humanitario”, según informó la casa presidencial en un comunicado.
“En el día dos mil del cautiverio de la señora Ingrid Betancourt, el presidente de la república se comunicó por teléfono con la familia de nuestra compatriota y le aseguró la total determinación de las autoridades francesas y de su compromiso personal para obtener la liberación de Ingrid Betancourt y de los demás rehenes retenidos por las FARC”, señala el documento.
“Son dos mil días, es una espera demasiado larga. Es insoportable”, declaró el hijo de Betancourt, Lorenzo, acompañado por su hermana Melanie y su padre Frabrice señaló Melanie a periodistas reunidos en el puente Marie, cerca de la municipalidad de París. “. Los tres participaron en un acto de recolección de firmas para pedir la liberación de Betancourt.
“No sabemos dónde está mamá. No sabemos si está viva. No sabemos en qué estado de salud se encuentra”, señaló Melanie a periodistas reunidos en el puente Marie, cerca de la municipalidad de París. “Si está viva, ¿por qué no son capaces de darnos una imagen, una carta?”.
Su hermano Lorenzo, de 18 años, dijo que quieren “una prueba verosímil de que está viva, un video”.
Betancourt y la directora de su campaña presidencial Clara Rojas fueron secuestradas el 23 de febrero de 2002. La última vez que las FARC ofrecieron pruebas de que estaba con vida fue en 2003, aunque un soldado secuestrado que se fugó recientemente dijo haberla visto no hace mucho.
“Nosotros no las olvidamos”, expresó el ministro de relaciones exteriores Bernard Kouchner en una declaración.
En Francia se organizaron una treintena de manifestaciones en muestra de solidaridad con la secuestrada y para exigir pruebas de que está viva.