Un cuerpo firme, delgado y sin celulitis se puede lograr gracias a los nuevos tratamientos que existen en el mercado.
Conservar un cuerpo firme, delgado y sin celulitis ya no es una odisea, desde hace tiempo, se aplica en México una nueva técnica para logarlo.
Se trata de un procedimiento argentino-italiano de modelación y reducción de medidas, el cual explica Gabriela Pérez Beccaria, directora general del Centro de Rejuvenecimiento Prontobella.
El tratemiento consiste en una serie de tratamientos en cabina, con productos específicos, con la que se logran reducir hasta 50 centímetros en todo el cuerpo.
Se aplica en las zona de mayor acumulación de grasa, como abdomen, cintura, cadera y muslos, pero también en la espalda y los brazos.
"El objetivo de los tratamientos Prontobella es el cuidado de la piel del rostro y el cuerpo. Nuestro sistema corporal tiene tres etapas", dice Pérez Beccaria, y los describe:
La primera dura dos horas y consiste en el cepillado de la piel y aplicación de vendas calientes y cápsula de calor, un aparato en el cual el paciente (previamente vendado y con un traje térmico) se recuesta durante media hora. Además de calor, este instrumento emite vibraciones que estimulan el buen funcionamiento de los riñones.
La segunda y tercera implican tratamientos de cabina en las zonas de mayor acumulación de grasa o donde se tiene celulitis, como abdomen, muslos, caderas o glúteos". Para completar el tratamiento básico, se requiere de tres sesiones de cada etapa.
Antes de someterse al tratamiento, el paciente se entrevista con el médico del centro de rejuvenecimiento para elaborar su historia clínica y determinar si es candidato a recibirlo.
Sólo hay dos casos en que no se recomienda: en el de mujeres embarazas o en lactancia y en el de pacientes con enfermedades infecciosas. El costo del tratamiento básico es de siete mil pesos.
1. MEDIR Y PESAR
En la primera visita el paciente se pesa y se le toman sus medidas corporales; éstas se compararán al finalizar la sesión.
2. CEPILLADO
Mediante cepillos de cerdas suaves, se frota todo el cuerpo para eliminar las células muertas y abrir los poros, de modo que los productos reductivos y anticelulíticos penetren mejor.
3. MASAJE LINFÁTICO
Se aplica el gel reductivo y anticelulítico que contiene centella asiática, ginkgo biloba y cafeína, principalmente, y se aplica al paciente un suave masaje para facilitar el flujo de toxinas en el sistema linfático, de manera que se eliminen más fácilmente a través de la orina.
4. VENDAS CALIENTES
Impregnadas de un líquido reductivo y anticelulítico (que contiene los mismos ingredientes que el gel), se colocan en todo el cuerpo del paciente (menos en el busto).
Después, se le pone a la persona un traje térmico y se le introduce en la cápsula de calor. Con esto no sólo se reducen medidas, sino que se moldea la silueta.
5. SEGUNDA VISITA
Se tratan las zonas más rebeldes del cuerpo: muslos, abdomen, cintura, con el láser frío, que fomenta la circulación sanguínea local, promueve la producción de colágeno y elastina y tonifica la piel. En esta misma sesión, se incluyen 20 minutos de ejercicio en un aparato llamado multiplex, que tonifica el cuerpo.
6. TERCERA VISITA
La última etapa del tratamiento consiste en la endermoterpia (una tecnología que trata las capas medias de la piel, para disolver los depósitos de grasa localizada, en abdomen, muslos, glúteos), que ayuda a drenar sustancias tóxicas.
