Los adultos mayores son consumidores exigentes

Las personas de la tercera edad no se dejan llevar tan fácilmente por la publicidad, informa Profeco

TORREÓN, COAH.- Los adultos mayores no compran sin motivo. Según la Profeco, los consumidores mayores de 65 años no se dejan llevar fácilmente por la publicidad, piden un trato personal a los vendedores, y su dinero lo destinan principalmente a bienes y servicios de primera necesidad.

Lourdes Tirado Medina, jefa del programa de Educación y Divulgación de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), dijo que los adultos mayores, aunque su fuerza física y habilidad están mermadas al igual que sus recursos económicos, son consumidores exigentes.

Una descripción, agregó, del comportamiento de compra de las personas mayores se resume en que cuidan su dinero y compran en función de la confianza que les inspiran los artículos y los establecimientos.

En su mayoría, los adultos mayores aprovechan y buscan las ofertas, tienden a ser fieles a los comercios en donde adquieren sus productos, un 30 por ciento acostumbra a leer las instrucciones de los artículos, y prefiere pagar en efectivo.

Además, los consumidores mayores prefieren adquirir alimentos que les fueron recomendados por sus geriatras y otros bienes de consumo inmediato, en establecimientos próximos a sus domicilios debido a las dificultades de movilidad o a los problemas de desplazamiento.

“Las perspectivas futuras de la población de la tercera edad en México, indican que el número de ancianos continuará y se agudizará en el futuro, por lo que en el campo de las necesidades de salud se deben identificar sus demandas y necesidades”.

Sin embargo, Tirado Medina señaló que en México existe poca información relacionada con aspectos nutricionales en ancianos. En relación a los alimentos que con más frecuencia consumen son predominantes los de costo bajo o medio y principalmente de porciones escasas y gran porcentaje de la población se inclina hacia un mayor consumo de verduras y cereales.

Generalmente las causas que alteran la ingestión dietaria de los ancianos involucran fundamentalmente los siguientes factores: sociales (pobreza, ignorancia, aislamiento, abandono familiar); psicológicos (estados depresivos, soledad, luto, demencia); dentales (pérdida de órganos dentarios, caries dental, enfermedad parodontal, edad y estado de la prótesis dental); funciones sensoriales disminuidas; enfermedades diversas; e ncapacidad para alimentarse por sí mismos.

Las personas mayores que disfrutan de movilidad y de autonomía, mantienen actividades de consumo muy semejantes a las que estaban acostumbradas en los años precedentes, por ejemplo: el 83 por ciento va de compras.

Sobre la alimentación del adulto mayor

Algunas recomendaciones de la Profeco para una buena alimentación del adulto mayor son:

- No comer rápido, pues la digestión empieza al masticar y de esta forma será mejor.

- La comida debe ser en trozos pequeños para facilitar su masticación.

- Aumentar el consumo de vegetales, consumir frutas y verduras de temporada.

- Cuidar los dientes y nunca ir a la cama sin haber aseado la boca.

- Consumir leche y alimentos que proveen de calcio, además de baños de sol de no más de 30 minutos para producir vitamina D.

- Aumentar el consumo de pescados y mariscos y moderar el consumo de carnes rojas.

- Preferir el consumo de agua sola o de frutas en lugar de refrescos, café o bebidas alcohólicas que interfieren negativamente.

- Limitar el consumo de embutidos, pastelillos, sal y grasas.

- Preferir carnes asadas o cocidas en muy poca grasa.

- Adecuar la dieta a las limitaciones motrices, funcionales, sensoriales y a las limitaciones debidas a enfermedades.

- Fraccionar la dieta en más de tres comidas.

- Comer en compañía de la familia.

- La familia deberá procurar la mayor atención posible para evitar la soledad y la depresión.

FUENTE: Profeco