En breve estarán en su apogeo las 16 deshidratadoras de chile de Poanas y dos plantas tecnificadas de Nombre de Dios.
POANAS, DGO.- En los últimos nueve días, el chile ancho recuperó su precio de 50 pesos el kilogramo en el mercado de abastos, mientras los productores lo comercializan a granel a diez y 12 pesos, es decir 316 por ciento menos que los “coyotes”.
El 8 de agosto, el precio se mantenía a 50 pesos, pero luego tuvo un desplome de 30 por ciento, es decir se cotizaba en el Mercado de Abastos a 35 pesos el kilogramo del picante ancho, aunque desde el 26 de julio los productores lo ponían en manos del consumidor a diez pesos.
De acuerdo con un recorrido de El Siglo de Durango por los municipios de Poanas y Vicente Guerrero, los productores como José Refugio Morones prefieren vender su cosecha en las calles más transitadas a 12 pesos y no malbaratarlo a 3.50 como lo pagan los “coyotes”.
Los chileros de Poanas, Guerrero, Nombre de Dios, Guadalupe Victoria, Rodeo y Nazas prefieren vender a granel, porque obtienen mejores utilidades, pero la mayoría termina por comercializarlo en toneladas para lograr una pronta recuperación a los intermediarios, quienes de inmediato lo colocan hasta 50 pesos en los centros de abasto.
Del 9 al 16 de agosto el precio del chile ancho tuvo altibajas de 35 a 45 pesos, pero a partir del 17 repuntó a 50 pesos el kilogramo, de acuerdo con la lista de productos agropecuarios en los mercados de abastos.
Según reportes de la Secretaría de Agricultura, esperan este año 12 mil toneladas de chile verde producido en los municipios ya citados, cuyo precio comercial equivale a 600 millones de pesos, de los cuales solamente una mínima parte queda en manos de los agricultores y la mayor ganancia en los intermediarios, de acuerdo con el sondeo de campo.
La superficie sembrada de chile en Durango es de cuatro mil 513 hectáreas, de las cuales casi tres mil corresponden al municipio de Poanas.
De esa cantidad, dos mil 866 hectáreas corresponden a la siembra de chile verde, y mil 647 hectáreas a los plantíos de chile rojo para deshidratar, de acuerdo con la Secretaría Técnica de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural del Estado (SAGDR).
Según el comportamiento del pasado ciclo productivo, la cosecha fue de 11 mil 500 toneladas de chile verde, y se comercializó a precios de entre dos y tres pesos por kilo por parte de los ejidatarios, pues los intermediarios lo venden hasta 50 pesos como lo anuncia el Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados en este diario regional.
Cebe señalar que los chileros con capital como la Sociedad de Producción Rural (SPR) Productores Tecnificados del Valle de Poanas comercializaron por su cuenta mil 800 toneladas a una empresa de San Luis Potosí, para exportación.
Anuncia la SAGDR entre el apoyo a la producción de chile en Durango la integración de un directorio de compradores potenciales de esta hortaliza; por lo tanto, se le envió a cada deshidratadora de chile una relación de las gestiones comerciales realizadas con potenciales compradores.
Empero, hasta el momento se observan vendedores en la calles, porque argumentan que les va mejor que entregar su cosecha de chile a los intermediarios; éstos son los verdaderos beneficiados de los programas del Gobierno. Falta mucho por hacer en favor de quienes luchan por alcanzar mejores índices de productividad y calidad.
Secadoras, a la orden
Las 16 deshidratadoras de chile están preparadas para iniciar labores en el presente ciclo en que se espera un rendimiento de hasta 30 toneladas de verde por hectárea, según el productor del ejido Villa Unión, José Refugio Moreno.
También están preparadas para entrar al proceso de secado las modernas plantas deshidratadoras de Santa Cruz de Guadalupe y Francisco Murguía.
Por su parte, Ildefonso Ramírez Rodríguez, productor y alcalde de Poanas, fue más conservador en su opinión de rendimientos con diez toneladas por hectárea.
Señaló que para lograr una tonelada de chile seco se requieren de seis a ocho de verde; la cosecha se augura muy buena para el presente ciclo.
Los ejidos productores de chile son Villa Unión, El Potosí, Orizaba, El Refugio, Los Ángeles, Noria de Pilares, La Joya, 18 de Agosto, Poanas, Cieneguilla, San Atenógenes, entre otras; así como los ejidos de Nombre de Dios como Santa Cruz de Guadalupe, Francisco Murguía y Amado Nervo. Todo esto incluyendo a Vicente Guerrero forman el potencial de chile en Durango.
Rodeo bajó su producción por la caída de precio en ciclos pasados; cambió a forraje una gran parte de la superficie, de acuerdo con el informe de la Unión de Ejidos Lázaro Cárdenas.
Comercio por vocación
Felipe Talavera Reyes y su compañera de siempre María del Refugio Solís cumplen 35 años de comerciantes de chile y otras hortalizas en los cruceros más transitados por la amas de casa, y aunque la situación es difícil no se quejan.
Procrearon 12 hijos, de los cuales cuatro están en Estados Unidos y el resto regados en Baja California y Durango, quienes en más de una vez les ruegan dejar el comercio y vivir bajo su dependencia, pero eso nunca, dice don Felipe, mientras tenga aliento para trabajar.
Son ejemplo de productividad, pues con 77 y 70 años de edad, respectivamente, don Felipe y doña María del Refugio se mueven en una camioneta para vender en las principales avenidas de ciudad Vicente Guerrero.
El chile ancho seco lo comercializa a 90 pesos el kilogramo y 80 pesos el pulla, son de la región, de mucha calidad; aunque cuando se da mucha cosecha el precio se desploma. Recuerda que hace 11 años se cotizaba a 100 pesos y un año después apenas llegó a los 12 pesos.
Don Felipe nació en el poblado Bolsa de Fierro, municipio de Nombre de Dios, pero tiene 45 años viviendo en Guerrero; fue tractorista en su juventud, pero siempre le gustó el comercio y con las ventas de chile se mantiene.
Estima que este trabajo es noble, siempre va a existir, porque será más económico para los consumidores que ir a los centros de abasto.