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Los riesgos de los 'comeuñas'

LA COSTUMBRE PUEDE ORIGINAR ALGUNOS MALES INFECCIOSOS.

Silvia Ojanguren| EL UNIVERSAL

La manía de mordérselas es muy popular entre niños y jóvenes, es muestra de nerviosismo y origen de ciertas infecciones.

Al escuchar la palabra onicofagia, difícilmente se piensa que se trate del término médico para definir la costumbre de comerse las uñas, un hábito que debe ser evitado porque tiene serias repercusiones estéticas y puede ser la mecha que encienda algunos males infecciosos.

Este problema, según datos de la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD), es muy popular entre los niños y adolescentes, pues cerca de 30% de ellos forma parte del club de los comeuñas.

Entre los adultos también tiene víctimas, ya que 5% de los hombres y mujeres acostumbra arrancarse las uñas con lo dientes.

Alerta

La dermatóloga Addy Gladys Arceo Núñez explica que comerse o morderse las uñas es síntoma de que la persona es víctima de estrés y tiene como consecuencias infecciones en las uñas, deformidades estéticas de manos y labios, así como en la forma de los dientes.

Todos los comeuñas tienen que luchar para dejarlo y recurrir a un dermatólogo, "ya que esta especialidad no sólo abarca enfermedades de la piel, sino de las mucosas y sus anexos; es decir, las estructuras derivadas embriológicamente de la piel, como el pelo y las uñas". Este llamado de alerta forma parte de la campaña ¡Cuídate, infórmate!, que realiza la FMD con el respaldo de los laboratorios Darier, Fedele e Intendis.

PLATO PELIGROSO

Las uñas y la piel de los alrededores llega a sufrir ataques que deterioran las zonas y requieren atención de un experto.

Según la dermatóloga Arceo Núñez, las enfermedades conocidas por los médicos especialistas como ungueales u onicopatías son las que producen cualquier alteración que afecte a la uña.

"Son múltiples los padecimientos que encontramos en estas pequeñas partes del cuerpo; las más frecuentes son las traumáticas (derivadas por golpes o deformaciones provocadas por el hábito de morderse las uñas), infecciosas (por hongos, bacterias o virus) o tóxicas.

Pero la amenaza no para allí. La especialista señala que en ocasiones las uñas sufren diferentes tipos de enfermedades clasificadas en sistémicas, las relacionadas con padecimientos cardiacos, pulmonares y otros, así como genéticas, como la displasia ectodérmica, que impide que el cabello crezca correctamente.

CINCO DATOS IMPORTANTES:

1. Son láminas de queratina, protegen los dedos de manos y pies, y son consideradas embellecedoras.

2. Sirven para realizar acciones de precisión: abotonarse, ejercer presión de pequeñas cosas o rascarse.

3. Son parte de los sensitivos dedos; relevantes en la comunicación interpersonal en diferentes niveles sico-sociológicos.

4. Las uñas sanas pueden tener forma ovalada y de color parcialmente rosado.

5. Las de las manos crecen de cuatro a cinco veces más rápido que las de los pies. En verano crecen más que en invierno.

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