La wiitis es la más reciente dolencia producida por los excesos cometidos a la hora de practicar videojuegos. Entre las primeras lesiones reportadas en 1981, está una lesión de muñeca generada por jugar Space Invaders, como resultado de presionar repetidamente el botón del joystick. (El Universal)
No sólo la propia integridad física de los jugadores se pone en riesgo cuando se ejecuta un videojuego sin seguir las debidas recomendaciones de seguridad.
Lesiones por movimientos bruscos y repetitivos en pulgares, muñecas, codos, brazos y hombros podrían ser el doloroso resultado de jugar excesivamente con las populares consolas de videojuegos Wii, de Nintendo.
Dentro de la información incluida en los manuales para el usuario, esta popular empresa de videojuegos advierte, además, que: “Algunas personas (aproximadamente una de cada 4 mil) pueden tener ataques o desmayos a causa de destellos o patrones de luz y esto puede suceder al ver televisión o jugar juegos de video”.
La lista de padecimientos posibles incluye fenómenos adversos como cansancio ocular, mareo, tendinitis, síndrome del túnel carpiano, irritación de la piel e interferencia con aparatos médicos sensibles, como los marcapasos.
Los padecimientos en tendones, músculos y articulaciones se producirían cuando los jugadores realizan demasiados movimientos simulados al practicar videojuegos (tenis, golf, béisbol y demás) con el wiimote: un control remoto que se toma con la palma de la mano.
No sólo la propia integridad física de los practicantes se pone en riesgo cuando se ejecuta un videojuego sin seguir las debidas recomendaciones de seguridad. Nintendo alerta también contra probables daños en las pantallas de TV y terceros que se encuentren cerca de los jugadores.
Julio Bonis, un médico español, denomina a este nuevo tipo de lesiones con el nombre de wiitis (una versión moderna de la nintendinitis). Consiste en una inflamación dolorosa en el hombro que se produce tras extenuantes sesiones de tenis con una consola Wii.
La wiitis es la más reciente dolencia producida por los excesos cometidos a la hora de practicar videojuegos. Entre las primeras lesiones reportadas en 1981, está una lesión de muñeca generada por jugar Space Invaders, como resultado de presionar repetidamente el botón del joystick.
El tratamiento recomendado, además de recurrir a analgésicos y antiinflamatorios, incluye la abstinencia de jugar. Una buena recomendación consiste en realizar ejercicios de calentamiento y estiramiento previos, pues aunque los juegos sean virtuales, las lesiones pueden ser muy reales.
FUROR MUNDIAL
El éxito provocado por la consola Wii es tal que su demanda en el mercado es mayor a la oferta disponible. La consecuencia de este fenómeno, aparentemente no anticipado por Nintendo, consiste en la escasez relativa del producto.
De acuerdo con el sitio www.vgchartz.com, al mes de junio de 2007 las ventas mundiales de la consola Wii sobrepasan 8 millones de unidades. El primer lugar lo mantiene la Xbox, de Microsoft, con casi 10 millones de equipos vendidos. En un lejano tercer lugar se coloca Play Station, de Sony, con 3 millones de equipos colocados.
Los programas más populares son los Wii Sports, con 6.78 millones de ejemplares. Le sigue en segundo lugar Wii Play, con 3. 53 millones. En tercera posición se coloca The Legend of Zelda: Twilight Princess, con 3.25 millones.
Las lesiones son sólo algunas de las posibles situaciones colaterales adversas de las consolas, pues ciertos tipos de videojuegos en línea pueden provocar problemas de adicción entre los usuarios tan intensos, que ya se les conoce con el nombre de heroinware: la nueva droga del siglo 21.
Casos como EverQuest, la nueva Edad Oscura de Camelot o Diablo II plantean problemas complejos en función de sus características de charla, que dan a tales juegos un aspecto social. Además, su naturaleza de colaboración/competencia con o contra otros jugadores, en algunos casos los hace realmente difíciles de dejar.
¿Cómo saber si se es adicto a este tipo de juegos? Basta con considerar las dos características que definen una adicción: 1) la persona se engancha a la actividad por un tiempo más largo del originalmente previsto y 2) continúa jugando, a pesar de las consecuencias adversas.
En ocasiones, la adicción puede llegar a situaciones extremas. Hace dos años en la ciudad de Taegu falleció el señor Lee, un surcoreano desempleado de 28 años. La causa probable de su muerte: un fallo cardiaco provocado luego de jugar en línea durante casi 50 horas ininterrumpidas. El occiso sólo tomaba descansos ocasionales para ir al baño y dormitar de vez en cuando.
La wiitis es la más reciente dolencia producida por los excesos cometidos a la hora de practicar videojuegos. Entre las primeras lesiones reportadas en 1981, está una lesión de muñeca generada por jugar Space Invaders, como resultado de presionar repetidamente el botón del joystick. (El Universal)
