El pequeño Miguel Ángel acompañado por su madre Janeth (der.) y su bisabuela Pánfila.
Desde hace quince días, Miguel Ángel de tres años de edad está internado en el Hospital General de Torreón debido a un problema renal grave. Su madre Janeth no se le separa y Pánfila, abuela de ésta, busca ayuda como puede para curarlo.
TORREÓN, COAH.- Entre los brazos de su madre y en su pequeña manita un catéter, se encuentra Miguel Ángel, de tan sólo tres años de edad, quien desde hace más de 15 días está en el Hospital General, víctima de un problema renal.
Janeth Aguirre es su madre. No habla ni oye. Ante ello, Pánfila Jaques, su abuela, explica que por segunda vez en menos de un año y medio, Miguel Ángel ha sido internado por el mismo problema.
“Lo trajimos al hospital porque su pancita, pies, manos y su carita, comenzaron a hincharse”, dice Pánfila mientras trata de explicar lo que sucede a Janeth.
Debido al estado de salud en el que se encontraba el menor, fue internado de manera urgente. De acuerdo con el director del nosocomio José Gerardo Jaidar Ugarte, explicó que los síntomas que presentaba Miguel, eran debido a una anasarca, es decir, una retención de líquidos provocada por los bajos niveles de proteínas, ya que su cuerpecito las expulsaba a través de la orina.
Es por eso que Janeth no se ha separado ni un instante de su hijo, situación que le ha costado no ver en todo ese tiempo a su pequeña Perla, de cuatro años de edad.
Pánfila comenta que Janeth vive en Lerdo, con Jesús, su actual pareja, desde hace más de dos años, tiempo en el que el padre de Miguel los abandonó “porque siempre andaba de borrachote”, dice la abuelita.
Desde entonces, Jesús ha apoyado a Janeth con las pocas ganancias que obtienen en su oficio de albañil, actividad que no es segura, “pues a veces tiene trabajo y otras tantas no”, platica la mujer de avanzada edad.
“Por eso mi hijo, padre de la mamá de Miguelito, les ha dado mucho la mano porque solos no podrían con el sueldo que gana Jesús”, comenta Pánfila.
Ante esta situación, la cuenta del Hospital se ha convertido en una “pesadilla” para la familia del pequeño, pero de acuerdo con los directivos del nosocomio, no se dará un total hasta que el niño sea dado de alta, mientras tanto no se podrá especular sobre el monto de la misma.
“Haremos un estudio socioeconómico, por lo tanto, no se les podrá pedir más de lo que nos puedan pagar”, aseguró José Gerardo Jaidar Ugarte, director del Hospital General.
Así mismo, según explicó, una vez que se tenga un total, la misma institución, a través de sus trabajadoras sociales, canalizará su caso al DIF, a Salud Municipal y a Cáritas, con el fin de obtener apoyos para su liquidación.
“Son cargos de recuperación los que hacemos, independientemente de lo que junte la familia en estas dependencias, nosotros sólo les pediremos lo que nos puedan dar, ya sea 200 ó 300 pesos, no más”, señaló Yolanda Silva, trabajadora social del nosocomio.
Pero para evitar una recaída del menor estará vigilado por la institución, a través de visitas regulares al Hospital, por lo que la familia del pequeño Miguel solicita el apoyo de la ciudadanía para continuar con su recuperación. Cualquier apoyo, ya sea en especie o en efectivo llamar al teléfono 7-31-69-00, con Leonor Aguirre, tía de Miguel Ángel.