En el interior de este domicilio en Valle de Chapala, durante la madrugada de ayer, fue encontrado el cuerpo sin vida de una joven mujer, quien decidió quitarse la vida.
Al llegar de una fiesta el hijo de 22 años decubre el cuerpo un recado póstumo
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Una joven madre soltera decidió quitarse la vida al colgarse de un cortinero en el interior de su domicilio, aprovechando la ausencia de su único hijo, quien al volver de una fiesta y abrir la puerta principal descubrió el cuerpo sin vida de su mamá y un recado póstumo.
La persona fallecida respondía en vida al nombre de Araceli, contaba con 42 años de edad y tenía su domicilio en la colonia Valle de Chapala, informó el agente investigador del Ministerio Público de Delitos contra la Vida y la Salud Personal.
Estableciéndose que la causa de la muerte fue asfixia por ahorcamiento, según dio a conocer el médico legista de la Subprocuraduría General de Justicia del Estado en la Región Lagunera de Durango. Mientras que la identificación del cuerpo fue realizada por el hijo de la ahora occisa.
Agentes de la Dirección Estatal de Investigaciones (DEI) indicaron que siendo aproximadamente las 03:00 de la mañana de ayer, se trasladaron al domicilio ya mencionado para entrevistarse con Misael de la Rosa, de 22 años de edad e hijo de la persona fallecida.
Misael manifestó que llegó a su domicilio aproximadamente las 02:45 horas de ayer, pues se encontraba en una fiesta y al abrir la puerta de la casa descubrió que su madre se encontraba colgada del cortinero, por lo que pidió auxilio a los vecinos para descolgarla y tomó unas tijeras para cortar el cordón de tela que su madre tenía atado al cuello.
Desafortunadamente ya carecía de signos vitales y encontrándose en uno de los sillones de la sala, una nota escrita por Araceli, a través de la cual le pide perdón a su hijo por el dolor que le causa y manifiesta que su vida ha sido muy dura. Allí mismo manifiesta que esa es su decisión.
El hijo de la ahora fallecida manifestó ante el Ministerio Público que su madre padecía frecuentemente depresiones, además de señalar que tenía poco tiempo de encontrarse sin empleo, pues dejó de laborar en la empresa Siete Leguas, donde se desempeñaba como inspectora de calidad.
Tras recuperar el recado póstumo y dar fe del deceso, el Ministerio Público procedió a ordenar el levantamiento del cuerpo y su traslado al Servicio Médico Forense (Semefo).
