El Cereso Uno se encuentra en un edificio viejo, el cual amerita varias remodelaciones.
El Siglo de Durango
Tanto en el Centro de Rehabilitación Social (Cereso) Uno como en el Dos hay la necesidad de mejorar los accesos de entrada y los estacionamientos, considera Zina Ruiz de León, directora de Prevención y Readaptación Social del Gobierno Estatal.
El penal ubicado en la capital del estado tiene la infraestructura más vieja, con más de 36 años de antigüedad. “Consecuentemente hay que arreglar parte de la cocina, del inmueble”, explica.
Se tienen diez millones de pesos para el mantenimiento de las cárceles distritales municipales y además cinco mdp para la ampliación de las celdas de las mujeres en el Cereso Uno.
PLANES
“Lo que se radicó de recursos será para el mantenimiento y algunas que van a ser nuevas cárceles municipales. Ya hicimos un recorrido, Obras Públicas del Estado ya está dándoles arreglo a varias de ellas, que están en Nombre de Dios, Nazas, Topia, El Oro, Guadalupe Victoria y Cuencamé”, notifica.
Se trata de darle mayor espacio a los internos, dotarlos de mejores condiciones en infraestructura. “Algunas son cárceles municipales muy viejas que hay la necesidad de hacerles una celda para mujeres porque casi en su mayoría no las tienen”, determina.
El sobrecupo del Cereso Uno persiste, aunque se prevé que se combatirá cuando entre en funciones el Cereso Tres en Guadalupe Victoria, que se proyecta sea inaugurado en el 2008.
