El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Carlos tuvo que pagar 35 pesos al taxista para llegar a su trabajo. Algunos padres de familia llevaron a sus hijos a la escuela en triciclos, mientras que a varios alumnos como Jorge no les quedó más remedio que caminar para llegar a la escuela.
Y es que con la suspensión del servicio del transporte público en varios sectores de la ciudad, cientos de personas enfrentaron contratiempos para realizar sus actividades cotidianas. En la redacción de El Siglo de Torreón, se recibieron varias llamadas telefónicas de usuarios molestos por el paro de los trabajadores del volante, y en la calle la inconformidad fue mayor.
Carlos Francisco Vargas Arias se comunicó por teléfono a la redacción de El Siglo de Torreón. Dijo que vive en la colonia Fovissste y que al salir de su casa se llevó una gran sorpresa al ver que ningún camión pasaba por las calles; en este sector proporcionan el servicio las rutas: Campo Alianza y Dorada.
?Me siento molesto e impotente por esta situación. Le tuve que pagar 35 pesos al taxista para que me llevara a la Alianza porque ahí es donde trabajo. No me parece justo que los choferes tomen este tipo de decisiones sin considerar a los usuarios?, dijo Vargas Arias.
Agregó que decenas de personas de la colonia Fovissste, tuvieron que pagar un taxi para trasladarse a sus centros de trabajo o a las escuelas, ?ya nos subieron las tortillas, la luz, la leche y no sé cuántas cosas más y ahora encima tenemos que gastar porque no hay camiones?.
En un recorrido realizado por El Siglo de Torreón en colonias como El Obispado, Villas La Merced, Sección 38, Residencial del Norte, entre otras, se observó a decenas de personas en las esquinas de las cuadras con la esperanza de que algún camión comenzara a prestar servicio.
Ante la desesperación, algunos como Jorge Sifuentes, quien vive en el fraccionamiento Sección 38 y utiliza la Ruta Sur, decidió caminar hasta llegar a la secundaria donde estudia y que se encuentra ubicada a pocos metros del Centro Saulo.
Los triciclos salvaron a muchas familias de caminar para realizara sus actividades diarias, pues durante el recorrido se observó a varios señores pedaleando fuerte para llevar a sus hijos a la escuela mientras las mamás, cuidaban de ellos.
