Los lobos son víctima de una leyenda negra, oscura como boca de lobo.
La tradición afirma que son terribles animales carniceros, crueles y malvados. En los cuentos infantiles -Caperucita Roja, Los Tres Cerditos y otros- aparecen los lobos como el compendio de toda la ferocidad. Y cuando la Edad Media quiso poner de manifiesto la bondad de San Francisco, el lobo de Gubbia fue obligado contraste de maldad.
Sin embargo los naturalistas afirman que el lobo es un animal tan noble como el perro. A diferencia de los hombres, mata nada más para vivir. Lleno de instintos solidarios, cuida amorosamente de sus crías.
Si de animales feroces y malvados se trata, el género humano obtiene de seguro el primer lugar.
No hacen filosofía los lobos en su cubil del bosque. Pero si la hicieran tendrían razón para decir: "El lobo es el hombre del lobo”.
¡Hasta mañana!...