Me habría gustado conocer a Jomí García Ascot, poeta.
Por puro azar -el azar siempre es puro- hallé un poema suyo, deslumbrante. El poeta escucha una canción cualquiera en medio de la noche. Y se pregunta:
"... ¿Quién canta, a estas horas, en una casa vecina?... La canción no es lo que importa -es esta vez vulgar y no especialmente sentimental o alegre- pero suena en la noche como una concha de mar entre montañas... Canta seguramente una sirvienta joven. Ellas muchas veces tutean a la vida. Nosotros, demasiado, esperamos una hermosa canción en un lugar debido. Ella esta noche nos ofrece en su canto sin gracia la gracia misma de las cosas que son, lo que es y vive y no reconocemos casi nunca...".
Me habría gustado conocer a Jomí García Ascota. Sabía él que "... lo súbito irrumpe a veces, como ahora, para tal vez decirnos que aún existen ciertas fuentes en jardines ocultos y olvidados...".
¡Hasta mañana!..