TANTO EN EL PASADO como en el presente, México ha sido de manera tradicional, sistemática y tenaz, un país de múltiples carencias. Hacer un somero enunciado de todas y cada una de esas carencias sería materia de un libro de varias páginas, cosa que no me propongo hacer por respeto a mis lectores.
HEMOS CARECIDO históricamente de educación para nuestros niños y jóvenes. No tenemos la inversión necesaria para crear los empleos que demanda la creciente población; El agro mexicano sufre la falta de apoyos, financieros, de programas de desarrollo y de la tecnología e infraestructura acuífera necesaria para lograr una producción agrícola que pueda alimentar a más de 105 millones de mexicanos.
Y ASÍ PODRÍAMOS SEGUIR listando hasta el infinito, pero de lo que no podemos llegar a carecer es del petróleo so pena de suicidarnos como nación. Según los datos que todos conocemos, Petróleos Mexicanos tiene reservas petroleras localizadas en el subsuelo de México únicamente para los próximos nueve años, y de no realizarse las inversiones en exploración que esta urgencia demanda, en nueve años (nada más sexenio y medio) el país se verá en a necesidad de importarlo con todas las terribles consecuencias económicas y políticas que eso representaría.
¿PODEMOS SIQUIERA IMAGINARNOS el estado caótico en que nos encotraríamos reduciendo el gasto publico en un 40%, que es el por ciento que de los ingresos totales que recibe el Gobierno cada año, provienen del petróleo?
ANTE LA FUERZA DE LA REALIDAD nos quedarían pocas opciones:
Una, seguir herméticamente cerrados a la inversión privada local o extranjera en PEMEX la otra permitir la apertura para las inversiones en la paraestatal de manea controlada y sujetándola siempre al interés nacional llegar así a explotar de manera mas eficaz y con dinero fresco, nuestros recaros de hidrocarburos.
PARA LLEGAR ATENER una visión efectiva de los que significa en este siglo XXI el tener o no petróleo, bástanos recordar que gran parte de la tensión mundial en el medio oriente y en otras regiones del mundo, se encuentra conectada directamente con el petróleo.
LOS ESTADOS UNIDOS en busca del aseguramiento de una de sus fuentes mas importantes de hidrocarburos, no tuvo empacho en hacer una guerra a once mil kilómetros de sus fronteras, con la injustificable y dolora perdida de vidas humanas y el gasto de cientos de miles de millones de dólares.
EL EQUILIBRIO político de los países del medio oriente, productores o no de petróleo, se fundamenta de manera primordial en la manera cómo se produce, industrializa, se vende y distribuye este valiosísimo producto que viene siendo la sangre misma del cuerpo que hoy conocemos como la cavilación del siglo XXI.
SERIA VERDADERAMENTE criminal y entupido que los mexicanos no sepamos que hacer con esa enorme riqueza, que como dijera el vate López Velarde, nos la escrituró el diablo, y que la providencia puso bajo los pies de esta tribu del planeta tierra tan irresponsable y que llaman mexicanos.
NOS PODRÁN LLEGAR a faltar muchas cosas, pero si nos llega a faltar la sangre del cuerpo, ese líquido vital que nos provee la energía para mover este enorme país, sin duda desapareceremos como nación tal y como ahora conocemos a este nuestro México.
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