DON ROBERTO GÓMEZ BOLAÑOS entró muy quietecito a la inmortal. Las trompetas y los clarines en el Templo del Dios Zeus, tocan a gloria y es que la cosa no es para menos, ayer arribó al paraninfo celestial el nuevo y severo crítico de arte: Don “Chespirito”.
NO CONFORME CON haber embobado a dos generaciones de televidentes con sus patéticos personajes, ahora nos resulta que “Chespirito” se ha convertido de la noche a la mañana, en un reconocido crítico de arte.
EN UN ARRANQUE de exigencia y con motivo de su estadía en la Feria del Libro celebrada en Bogotá, Colombia, declaró a los medios del mundo, que el llamado mural de “Guernica” obra del maestro Pablo Picasso, el pintor más grande que dio el Siglo XX, no es nada más que una caricatura.
Y UNO PODRÍA PREGUNTARSE si lo declarado por el Chavo del Ocho, no es otra cosa que una puntada o dislate para ganarse los encabezados de los medios o si es realmente una sincera crítica artística.
EL FAMOSO MURAL de Picasso fue la protesta y denuncia del artista por el salvaje bombardeo que hicieron las fuerzas de Francisco Franco, auxiliadas por los nazis y fascistas en 1937, sobre la población civil de Guernica, un pueblo vasco de España.
EL MURAL HA SIDO reconocido por el mundo civilizado, como la máxima expresión artística que denuncia la barbarie de la guerra y todos sus horrores, sin embargo el nuevo y reconocido crítico de arte ya dio a conocer al mundo su franco desacuerdo con la obra de Picasso.
PARA “DON CHESPIRITO y después que hubo analizado y estudiado de manera minuciosa el mural de Picasso, resolvió “que se trata de una trabajo en donde los dibujos le restan seriedad y que en vez de plasmar el dolor del pueblo bombardeado, pareciera que el villano se está festinando con su ataque”.
ANTE ESTE FLAMÍGERO juicio no queda al mundo racional y civilizado nada más que dos caminos: el primero, hacer caso omiso de la barbaridad de “Don Chespirito” y apuntársela como una más de sus tonterías en su ya apretado catálogo de desatinos.
LA SEGUNDA opción a escoger por el mundo consciente y racional, sería embestirlo con miles de calificativos y denuestos por su ignorancia y temeridad, pero ninguno de los dos caminos sería prudente y les diré por qué.
PUES EN EL ÚLTIMO minuto nos hemos enterado que en la Feria del Libro celebrada en Bogotá, dos fueron las obras más vendidas y en este orden: “Cien Años de Soledad” de Gabriel García Márquez y el libro ¡“Sin Querer Queriendo” de Don “Chespirito”!
Y SIENDO ASÍ LAS COSAS, sería un verdadero atentado de mi parte diferir de los juicios artísticos de “Chespirito”, pues si literariamente hablando casi le dio en la torre al Gabo en su propia tierra, díganme ustedes con qué autoridad podría yo criticarle ahora sus opiniones sobre pintura.
IMAGÍNENSE cómo andará el mundo.
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