APENAS Y HABÍA traspasado el umbral del Reclusorio Norte de la Ciudad de México con base en la boleta de libertad que le expidió el juez penal que lo tenía sujeto a proceso, el señor Carlos Ahumada Kurtz fue secuestrado por un grupo de agentes al servicio del Gobierno del Distrito Federal que materialmente y en vilo, se lo llevaron al búnker de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.
NO OBSTANTE que el señor Ahumada no es una blanca palomita, en un Estado de Derecho la sentencia que dicta un juez, para bien o para mal, es la verdad legal y se acabó. Pero además, a don Carlos después de haberlo tenido preso por casi tres años ni siquiera le cantaron el clásico “usted dispense, pero los delitos que le imputaban nunca existieron”.
MUY POCAS PERSONAS saben y conocen que es lo que hay en el trasfondo de esta historia de corrupciones. Poquísimos mexicanos han podido saber lo que existe en ese pozo de detritus que los ingenuos llamamos política.
PERO DE LO QUE SÍ SABEMOS millones de mexicanos, fue del video grabado a René Bejarano el operador político Andrés Manuel López Obrador, guardando en su portafolio cientos de miles de dólares y metiéndose en los bolsillos del pantalón y saco, los que no le cupieron en el maletín. Como éstos, cientos de miles de dólares también les regaló Ahumada a otros funcionarios perredistas.
TAMBIÉN CONOCIMOS de los procesos iniciados en contra de delegados políticos y funcionarios de las Delegaciones de la Gustavo A. Madero, Tlalpan y Azcapotzalco y en contra del mismo Bejarano que llegó a su desafuero como diputado a la Asamblea del Distrito Federal.
DE TODOS ESTOS pájaros de cuenta solamente Ponce sigue encarcelado, los demás disfrutan y gozan de lo mal habido muy felices y contentos. La pregunta que nos debemos hacer sería: ¿Qué tanto sabrá y conoce Carlos Ahumada de las tranzas, negocios, obras no licitadas, tráfico de influencia, dádivas, sobornos y mordidas que se manejaron durante el Gobierno de AMLO en el Distrito Federal, como para ser perseguido, hostigado y amenazado con la saña y arbitrariedad como lo ha sido hasta la fecha?
ESTO LO LLEGAREMOS a saber el día que Carlos Ahumada (sin duda otro pájaro de cuenta), se anime y publique sus memorias políticas, económicas y hasta sentimentales y nos cuente de manera amena y con detalle, cómo supo enredar a tantos políticos de recia convicción de izquierda y militantes del PRD en sus turbios negocios y como si se tratara de la cereza del pastel, logró conquistar el corazón de la gobernadora de la ciudad más grande del mundo, doña Rosario Robles.
LA VERDAD es que nadie puede negarle talento, ingenio y carisma al argentino, por lo que esperamos anhelantes la publicación del libro con sus memorias.
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