SIN DUDA se trata de una resolución por muchos conceptos histórica con la que la Suprema Corte de Justicia de la Nación hace honor a su función de máximo intérprete de la Constitución.
EL MÁS ALTO TRIBUNAL DEL PAÍS resolvió que la nueva Ley Federal de Radio y Televisión recientemente aprobada por la Cámara de Diputados y ratificada por el Senado, no estaba apegada al marco de la Ley, muy especialmente en sus artículos 17-G, 28 y 28 A; sin embargo pretender hacer en unas líneas la síntesis jurídica de este tema de constitucional, sería tarea verdaderamente imposible. Es por ello, que trataré de penetrar más en el fondo y trascendencia de la resolución que en su contenido jurídico.
LA HISTORIA COMENZÓ con motivo de las reformas a la Ley Federal de Radio y Televisión que hizo la Cámara de Diputados, reformas que la opinión pública siempre señaló habían sido hechas muy a modo y gusto de los dos monopolios televisivos del país, Televisa y TV Azteca.
DURANTE EL DESARROLLO DE LAS primeras etapas del proceso legislativo, la opinión publica pudo identificar a un grupo de diputados que de una u otra manera presionaban su aprobación y que por otra parte y también se decía, que habían recibido atenciones muy especiales por parte de las empresas televisoras. Este grupo de diputados comprometidos con el proyecto al que se llegó a llamar “La Ley Televisa”, estaba encabezado por Emilio Gamboa Patrón.
EN SU MOMENTO, la Cámara de Diputados muy al vapor y en sólo siete minutos aprobó las cuestionadas reformas a la Ley en comento, pasando a la Cámara de Senadores que como órgano revisor, la aprobó por mayoría.
INCONFORME UN GRUPO de más de cuarenta senadores encabezados por Manuel Bartlett (vetado durante más de diez años por Televisa), Javier Corral, Dulce María Sauri y Raymundo Cárdenas, entre otros, se opusieron a la aprobación, por lo que interpusieron una Controversia Constitucional, la que fue resuelta el pasado martes y favorable a los senadores que la habían impugnado.
EL HECHO se convierte de esta manera en un parteaguas de la vida política de México, que nos reconforta en estos tiempos de violación reiterada al Estado de Derecho. Es un precedente que alerta a los poderes legislativos para que se cuiden de hacer leyes que violen los principios de la Constitución de 1917.
LO EXCEPCIONAL del hecho es que el Poder Judicial de este país, regresó a las Cámaras una Ley por ellas aprobada y además promulgada por el Presidente de la República, para que legislándose nuevamente se enmiende el error y sea ajustada a la Constitución.
VEMOS CON BENEPLÁCITO que el sistema de división de poderes empieza a funcionar en México, cosa que casi nunca había sucedido. La tradición que conocíamos era la de una total y absoluta subordinación de los poderes Judicial y Legislativo a la voluntad del presidente de la República en turno. Parece que ahora sí y para bien, las cosas van cambiando.
CON ESTA RESOLUCIÓN la nación y los hombres que se mueven en la vida pública, han recibido una fructífera enseñanza que les indica cuáles son los caminos legales que se pueden hacer valer para preservar el Estado de Derecho y que en el sistema de Controversias Constitucionales habrá una nueva ruta a todos para el fortalecimiento de la vida democrática.
DÉMOSLES pues un reconocimiento a los senadores que supieron hacer valer sus derechos como legisladores y que abrieron un nuevo camino para el perfeccionamiento de las instituciones políticas en nuestro país.
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