La onicofagia es motivada por un desorden emocional o mental.
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Aunque puede parecer una cuestión inocente, que se presenta en el 45 por ciento de los niños en la pubertad, el morderse las uñas en forma reiterada es una alteración que puede derivar en problemas dentarios e infecciones frecuentes en la boca, señala la psicóloga, Gabriela Reyes.
Explica que a este mal hábito se le conoce como onicofagia y se refiere al hábito de comerse las uñas de uno mismo, lo cual puede ser motivado por un desorden emocional, mental o nerviosismo de la persona.
?Hay diversos factores que lo pueden causar, desde el hambre o el aburrimiento hasta el estrés o los nervios?, manifiesta, ?esto se presenta con mayor frecuencia en la adolescencia y en la pubertad, pero hay muchos casos de adultos o incluso ancianos que también lo padecen?.
La psicóloga dice que el morderse las uñas, además de las posibilidades de infección, el daño que provoca a la piel, a las uñas, y las caries en los dientes, habla de una gran carga de ansiedad en la persona, que deriva en este comportamiento compulsivo.
?Este hábito se contrae desde pequeños, igual que el niño que se chupa el dedo, son reacciones de la persona en un momento de mucho estrés o frustración, o incluso aburrimiento?, indica, ?algunos estudios establecen que el 45 por ciento de los niños en la pubertad se muerde las uñas, el 25 de los estudiantes universitarios y el diez de los adultos mayores de 35 años?.
Refiere que una opción para lograr que una persona deje este mal hábito es tomar vitamina B, que reduce las ganas de morderse las uñas por medio del aumento de la serotonina en el cerebro. En términos de psicología, se requiere de terapia conductual, para alejarse de este hábito y reemplazarlo por otro que no cause daño ni represente riesgos para la salud del individuo.
?Algunas personas se ponen picante en los dedos o se cubren las puntas para no mordérselos, lo primordial es que se quiera dejar este hábito?, dice la psicóloga, ?además, hay que combinar la reparación física de las uñas con la atención del estrés y la ansiedad en la persona?.
La psicóloga dice que este problema se presenta con menor frecuencia en las mujeres que en los varones debido a que las primeras tienen una mayor preocupación por la apariencia física de sus manos y sus uñas, por lo que de inmediato buscan ayuda para evitarlo.
Mal hábito
El morderse las uñas en forma repetida es una alteración de la conducta, derivado del estrés, ansiedad, nerviosismo o incluso aburrimiento.
-Se presenta con mayor frecuencia en varones que en mujeres.
-Es más común en la adolescencia y en la pubertad.
-El morderse las uñas puede provocar infecciones, además de daño a la piel, a las uñas, y caries en los dientes.
