Los tres decesos dados a conocer ayer por la Procuraduría tuvieron relación con el consumo de bebidas embriagantes.
El alcohol acabó con la vida de tres personas; la semana número 33 del presente año inició con tres decesos violentos en diferentes puntos de la entidad. En el primer caso, el consumo de embriagantes combinado con el exceso de velocidad y un menor al volante arrojó saldo de una persona muerta y una lesionada, mientras que relacionado también con las bebidas etílicas un sujeto murió al caer al suelo cuando cargaba una mochila con “caguamas” en estado inconveniente y por último, después de tomarse unas cervezas en una fiesta, un joven de 19 años se ahorcó.
Julián Acosta Nevárez, de 21 años; Eugenio Ibáñez Molina, de 45, y Diego Miguel Castañeda Soria, de 19, son la tres personas que dejaron de existir al inicio de semana por situaciones relacionadas con el consumo de bebidas embriagantes; el primero mencionado falleció en una volcadura en el municipio de Indé, el segundo en la capital del estado tras caer desde su propia altura y golpearse la cabeza, y el tercero se suicidó en Gómez Palacio.
QUINCEAÑERO EBRIO SE VOLCÓ; PERECIÓ SU PRIMO
Fractura de base de cráneo fue la causa de la muerte de Julián Acosta Nevárez, de 21 años, quien tenía su domicilio en el poblado La Victoria, municipio de Indé, lesión que sufrió al volcarse el vehículo que conducía su primo Arnoldo Acosta Escobar, de 15 años, quien resultó con mutilación de tres dedos de su mano derecha y traumatismo craneoencefálico.
Los hechos se registraron cuando los mencionados le pidieron la camioneta Ford, de la línea Lobo, al papá de Arnoldo para ir a una fiesta en el poblado El Palmito, del municipio de Indé, y después de ingerir por varias horas bebidas embriagantes decidieron regresar a su domicilio pero el exceso de velocidad y el estado etílico que presentaba el quinceañero provocaron que perdiera el control del vehículo y dieron varias volteretas antes de quedar sobre su toldo.
Julián perdió la vida instantáneamente, mientras que su primo fue ingresado al Hospital General de Gómez Palacio para su atención médica.
VENÍA CON CERVEZA Y AL CAER SE PARTIÓ EL CRÁNEO
Eugenio Ibáñez Molina, de 45 años, quien tenía su domicilio en calle Primero de Mayo, número 403, de la colonia Miguel de la Madrid, dejó de existir instantáneamente al caer desde su propia altura cuando se encontraba en completo estado de ebriedad y cargaba una mochila con varias cervezas en modalidad de “caguama”.
Según las declaraciones del hermano del occiso, Lorenzo Ibáñez, su consanguíneo era alcohólico y cada vez que probaba una cerveza no podía parar hasta emborracharse por completo y por tal razón, cuando iba llegando a su casa con una mochila cargada de cervezas, perdió el equilibrio y al caer al suelo se golpeó la cabeza, provocándose traumatismo craneoencefálico.
Después de tomar, se quitó la vida
La Procuraduría de Justicia estatal informó que el joven Diego Miguel Castañeda Soria, de 19 años, dejó de existir víctima de asfixia por ahorcamiento en el patio de su casa en el ejido San José del Viñedo, en Gómez Palacio.
Según la versión de los padres del occiso, Graciela y Mario, su hijo había ido a una fiesta y tomó algunas cervezas y cuando regresó a su casa en la madrugada se colgó con un cable de la luz de una viga de madera que sale de su habitación; además, comentaron que, efectivamente, el joven tenía problemas con su forma de beber y por eso creen que pudo venir la depresión y con esto la muerte.