Tres integrantes de una familia que intentaban cruzar a Estados Unidos, fallecieron ahogados en el río Bravo, en el municipio de Reynosa, logrando salvarse aferrado a unos arbustos sólo un niño de seis años de edad.
Los primeros informes indican que presuntamente la familia era originaria de Tula, Tamaulipas, y el hombre había contactado a un “patero”, quien huyó del lugar al ocurrir la tragedia.
Las personas ahogadas fueron identificadas como José Iván Camacho Aguirre, su esposa Rocío Aguirre Banda -quien estaba embarazada- y un hijo de ambos de sólo 2 años de edad.
El único integrante de la familia tulteca que sobrevivió fue encontrado por Ricardo Hurtado y Diana Ruiz, quienes el domingo andaban recogiendo leña y escucharon su llanto, cuando se sostenía sumamente asustado de las ramas de unos arbustos.
El niño relató que su papá le salvó la vida al arrojarlo a la orilla, pero luego desapareció entre el agua.
La Policía de Missión y la Bordel Patrol recuperaron el cuerpo del menor ahogado y a su madre; mientras que por el lado de México elementos de la Policía Municipal de Reynosa rescataron el cadáver de José Iván Camacho Aguirre y al pequeño sobreviviente.
Las autoridades municipales de Reynosa se comunicaron vía telefónica con familiares de las víctimas, quienes señalaron que el menor rescatado cumplía seis años de edad y por ello, en medio de la tragedia, le compraron un pastel.
Por algunas credenciales que portaban fue como los agentes de la Policía Municipal se enteraron que la familia era originaria de Tula, el municipio con mayor porcentaje de población migrante de Tamaulipas.
El juez calificador de Seguridad Pública Municipal de Reynosa, Roel Vela, informó que pudieron localizar fácilmente a los familiares de las personas fallecidas, porque el niño sobreviviente relató que un tío suyo es policía en el municipio de Tula.
Por ello se comunicaron con familiares de las víctimas y aproximadamente a las 23:00 horas del domingo el menor fue recogido por un tío suyo, Zeferino Camacho García, y su familia.
