Teherán afirma que el funcionario fue secuestrado en Irak por miembros de la CIA
La televisión iraní mostró ayer imágenes de las heridas de su diplomático Jalal Sharafi, quien afirmó haber sido torturado por miembros de la estadounidense Agencia Central de Inteligencia (CIA) durante su secuestro en Irak.
Sharafi, quien era el segundo de la Embajada de Irán para Bagdad, apareció en la cama de un hospital de Teherán, donde se mostraron las lesiones sufridas y se escuchaba la voz de un médico que daba cuenta de las mismas, de acuerdo con el reporte.
En el video de la televisión estatal el médico detalló las lesiones sufridas por el diplomático, quien fue liberado en Irak la semana pasada tras ser secuestrado por hombres armados en febrero, narró la manera en la que éste fue golpeado con un cable.
Sharafi presenta, de acuerdo con los reportes médicos, la nariz rota, lesiones serias de espalda, hemorragia del sistema digestivo, daños en los oídos y varios huecos en el talón del pie derecho.
La televisión mostró las imágenes del funcionario en momentos en que éste era visitado y examinado en el hospital por el embajador de Irak para Teherán, Majid Sheikh, así como por Peter G. Stocker, jefe del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Irán.
El jefe de la CICR en Teherán confirmó haber visto las lesiones en la nariz, piernas, espalda y pie de Sharafi, pero aclaró que no podía decir si habían sido causadas por tortura, de acuerdo con el reporte de la prensa iraní conocido en esta capital.
Sharafi afirmó haber sido capturado por agentes iraquíes que trabajan para la CIA y haber sido “torturado noche y día” al ser interrogado sobre el presunto apoyo que, según Washington, Irán brinda a los insurgente en Irak.
Irán acusó a Estados Unidos de estar tras el secuestro de su diplomático en Irak, aunque hasta ahora las Fuerzas estadounidenses siguen rechazando su implicación en ese hecho.
El diplomático fue liberado el pasado tres de abril un día antes que Teherán arrestara a 15 marinos británicos por presuntamente haber violado aguas territoriales iraníes, aunque hasta ahora las partes implicadas han rechazado relación entre ambos hechos.