Aseguran que en la balacera del sábado cayeron tres delincuentes y no dos, como lo informa la Procuraduría estatal. Agentes de la DEI piden más garantías para realizar su trabajo.
Exigen policías presupuesto propio para adquisición de más armas y proyectiles
El Siglo de Torreón
Completo hermetismo se percibe en las instancias de seguridad y procuración de justicia en torno a los hechos registrados el pasado sábado en donde murieron tres elementos de la Dirección Estatal de Investigación (DEI) y se rumora que hay diez detenidos, mientras que los policías de la citada corporación levantaron la voz para exigir a los altos mandos más garantías y proponen que exista un presupuesto para su agrupación aparte al que recibe la Procuraduría General de Justicia.
Agentes de la DEI se reunieron en las instalaciones de la Procuraduría estatal para proponer que su corporación reciba recursos aparte de los que obtiene la dependencia, pues aseguran que hace falta más dinero para surtirse de armas y municiones así como para tener el parque vehicular en mejores condiciones.
Aseguran que cuando van a pedir municiones tienen que pasar por todo un aparato burocrático, además de que los cambios de personal que se hacen en los diferentes sectores no son los adecuados, pues se han visto muchos casos de favoritismos o recomendaciones sin que tomen en cuenta a los que verdaderamente tienen vocación de servicio y mejor preparación.
MOLESTOS POR EL REGAÑO DEL GOBERNADOR
Los elementos policiacos recibieron un regaño por parte del gobernador del estado, Ismael Hernández Deras, quien les insinuó que por andar metidos en actos de corrupción les había pasado lo del sábado.
A este respecto, los agentes se pronunciaron en contra del señalamiento, pues aunque se haya comprobado mal trabajo de algún policía, afirmaron que no todos son iguales, además de que no toman en cuenta que fue un acto de valor el haber enfrentado a los delincuentes con todas las carencias que sufren.
Señalan que, por ejemplo, en el caso de José Quiñónez, quien se encuentra desaparecido desde hace ocho días, es un elemento honrado, que vive de su trabajo y que apenas está por terminar de pagar una humilde casa de Infonavit.
Personas allegadas de la familia de quien había sido comandante del grupo de la Unidad Contra el Crimen Organizado (UCCO) piden al Gobernador y al mismo procurador, Jesús Gutiérrez Vargas, que no cesen en las investigaciones para dar con el paradero del mencionado, quien tiene dos hijos y su esposa está por dar a luz un tercer infante.
NO DAN DATOS SOBRE PERSONAS DETENIDAS
Extraoficialmente se conoció que ya hay varias personas detenidas por su presunta responsabilidad en los hechos en los que más de 20 sujetos armados fuertemente dieron muerte a tres elementos policiacos.
No se sabe si los detenidos están en manos del Ejército o de la Procuraduría General de la República (PGR), pues el director de la DEI, Edilberto Acuña Díaz, aceptó que existe ese rumor, pero sólo comentó que él no puede dar información sobre el caso, que la instancia federal sería la encargada de otorgar datos al respecto.
Asimismo, se conoció que calculan que eran alrededor de 30 las personas que participaron directa o indirectamente por parte de los delincuentes, ya que algunos los estaban esperando en puntos estratégicos para apoyarlos tal como sucedió en la pista del poblado Las Nieves, en Ocampo, donde huyeron algunos de los maleantes.
Presumen que esconden un muerto
El día en que se registró la balacera entre elementos presumiblemente del grupo de los “Zetas” en contra de agentes de la Dirección Estatal de Investigación (DEI), la Procuraduría General de Justicia informó sobre la muerte de tres delincuentes en el municipio de Indé; posteriormente la misma dependencia dio a conocer que sólo eran dos los occisos por el bando de los malhechores. Sin embargo, gente que estuvo en las inmediaciones del lugar asegura que son tres los fallecidos.
Debido al hermetismo que se ha generado en las instancias de seguridad y procuración de justicia, los datos han sido modificados y no dan a conocer detalles, evidenciándose las irregularidades al momento en que hay personas que aseguran la muerte de tres de los delincuentes sin saber por qué las dependencias lo niegan.