La madre de Jamal Zougam, presunto autor material de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, negó la participación de su hijo en tales acciones al asegurar que la noche anterior al suceso él durmió delante de ella.
En su declaración en el juicio por los ataques a la red ferroviaria de Madrid que costó la vida a 191 personas, la señora Aicha Achad aseguró que Jamal durmió con ella y permaneció en su casa del barrio de Lavapiés hasta el día siguiente.
Explicó que la mañana del 11 de marzo de 2004 su hijo desayunó con ella en casa, vieron la televisión, despidieron a su otro hijo Mohamed cuando salió a trabajar.
Agregó que posteriormente su hijo se fue al gimnasio, lo que hizo en los siguientes días antes de ser detenido por la Policía la tarde del 13 de marzo.
Zougam, marroquí como la mayoría de los 29 procesados, es acusado de haber estado en los trenes la mañana del 11 de marzo de 2004 y es señalado por dos personas que aseguran haberle visto en los vagones, lo que contrasta con su declaración.
Asimismo, se le acusa de haber comprado los teléfonos que se utilizaron para hacer estallar las bombas colocadas en los trenes.
En la jornada de juicio que se reanuda tras el puente por el Día del Trabajo, están pendientes declarar representantes del Cuerpo Nacional de Policía, sobre los explosivos encontrados en una mochila que se sustrajo de uno de los vagones.