ESTUDIOS | GOBIERNO FEDERAL NIEGA MEDICIONES A INVESTIGADORES Y JURISDICCIÓN SANITARIA.
EL SIGLO DE TORREÓN
Advierten que no se puede saber nivel de exposición sin medir el plomo en el suelo.
Torreón, Coah.- ?Información restringida?. Así responde la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) a las solicitudes para conocer los resultados de contaminación por plomo en el suelo alrededor de la planta de Peñoles.
Tanto la Jurisdicción Sanitaria VI como los médicos e investigadores Gonzalo García Vargas y Manuel Velasco Gutiérrez (dos de los expertos que más han investigado la contaminación por plomo) han solicitado desde hace dos años a la Profepa los resultados del monitoreo que realiza para medir la contaminación por plomo en suelos y polvos, sin obtener respuesta.
En la Jurisdicción Sanitaria, que depende de la Secretaría de Salud de Coahuila, hay incluso una contradicción y falta de conocimiento sobre el tema. Mientras el jefe de la Jurisdicción, José Aguirre Carrillo, afirma que Profepa no ha entregado los datos, el secretario de Salud, Raymundo Verduzco asegura que la dependencia sí tiene acceso a los resultados en el suelo porque Peñoles los entrega, pero la empresa sólo realiza monitoreo ambiental.
Cuestionado sobre si la Secretaría de Salud cuenta con resultados del monitoreo en suelos, Verduzco confundió estos estudios con monitoreos ambientales y dijo que éstos permiten conocer la contaminación en el suelo, cuando eso no es posible.
?La empresa nos entrega el monitoreo ambiental y si sabemos que el aire está limpio y dentro de la norma, el suelo también, porque se va a estacionar en tierra?, dijo Verduzco.
Sin embargo, García y Velasco coincidieron que éstas son mediciones diferentes y que el monitoreo del suelo es más efectivo para conocer los niveles de plomo al que están expuestos los niños.
La cantidad máxima permisible en suelo es de 600 microgramos de plomo por cada gramo de suelo, según los estándares internacionales, pues en México no existe norma oficial al respecto.
Hace dos semanas, el titular de Profepa, Ignacio Loyola, dijo que los niveles de plomo en el suelo eran aceptables pero no mostró documentos para respaldar la afirmación.
Gonzalo García Vargas dijo que cuando se desempeñó como coordinador del Programa de Metales, solicitó los resultados en abril de 2006 al Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI), ?La respuesta que recibí fue que esa información estaba restringida porque existe una demanda interpuesta por organizaciones en contra de la Profepa?.
Por su parte, Manuel Velasco Gutiérrez, señaló que esa información la solicitó al IFAI hace dos años y medio y no ha tenido respuesta.
La importancia de conocer esos resultados, explicó Velasco Gutiérrez, es porque el suelo y los polvos, a través de las manos y boca, son la principal fuente de contaminación para los niños.
?Esta falta de información genera problemas porque no permite evaluar los riesgos y la evolución de los mismos, sabemos que la exposición al plomo ha disminuido porque lo vemos en los niveles de sangre de los niños pero hay algunos casos nuevos?, dijo García.
El especialista dijo que las únicas mediciones disponibles son los monitoreos ambientales que realiza Peñoles.
