El trío Óox formará parte del concierto de la Camerata de Coahuila esta noche. (Fotografías de Érick Sotomayor)
La Camerata de Coahuila vuelve a recibir a Sebastian Kwapisz, ahora como invitado en el trío Óox junto a Ville Kivivuori y Arturo Nieto
TORREÓN, COAH.- Un concierto luminoso, de música transparente y virtuosa es el que ofrecerá esta noche la Camerata de Coahuila con el trío Óox como invitado especial, esto dentro del marco del Festival Artístico Coahuila 2007.
La presentación se llevará a cabo en punto de las 8:30 de la noche en las instalaciones del Teatro Nazas, en donde bajo la dirección del maestro Ramón Shade los músicos interpretarán obras de Beethoven y Schubert.
“Óox es un trío nuevo formado por muy talentosos y jóvenes músicos, a los tres los conozco, hemos estado haciendo música en diferentes ocasiones”, pues uno de estos músicos es Sebastián Kwapisz, quien fue concertino de la Camerata y violinista favorito del público lagunero.
Aprovechando la participación de este trío también conformado por Ville Kivivuori y Arturo Nieto Dorantes, dice Shade que se pensó en el Triple Concierto en Do Mayor para Violín, Cello y Piano Op. 56 porque: “Es un concierto grande, porque cuando hay un concierto para piano el piano presenta el primer tema, el segundo y así; pero en este caso tiene que presentarlo cada uno de ellos, recordemos los maravillosos tríos como El Archiduque, entonces si se conjuga un trío y un instrumento sinfónico –Beethoven manejaba los dos lados de una manera maravillosa- y se logra algo muy importante”.
Y en cuanto al aspecto técnico de la obra asegura Sebastián Kwapisz que es un reto: “Es un concierto bastante complejo en cuanto a ensamble de un trío, porque de por sí un trío como tal es un ensamble difícil porque tenemos a un piano que siempre va a sonar más que un violín o un cello, entonces hay que buscar esa paridad en la sonoridad y si a eso le agregamos que hay que estar con la orquesta pues ya es dos veces más difícil, y obviamente, cada uno de los integrantes del trío es solista, entonces es música de cámara, con solistas, con orquesta, todo a la vez. Hace poco hablaba con un amigo sobre porqué casi no hay conciertos triples, yo sinceramente puedo mencionar solo uno: este que vamos a tocar, y la respuesta fue que (el trío) es la instrumentación más difícil para componer un concierto, hay solo una instrumentación más difícil -de eso ni existen conciertos- que es trío de cuerdas que es violín, viola y cello, instrumentar eso es lo más difícil”.
En la segunda parte del programa la orquesta tocará la muy “bipolar” Sinfonía en do menor de Schubert: “Recordemos que (con la Camerata) Román Revueltas hizo la N.6, la No.5 la hizo Lomónaco, la tres la hizo Tatúl (Yeghiazaryan) y a mí me toca hacer la No.4”, y dice el maestro que en este caso se trata de una sinfonía muy luminosa “no me gusta el nombre de ‘Trágica’ porque sí es trágica pero es muy positiva hacia donde termina que es el Do Mayor que es la tonalidad más luminosa que puede existir”.
Una vez más
Sebastian Kwapisz expresó su gusto de volver a tocar con la Camerata de Coahuila a casi un año de haber subido por última vez al escenario como parte de la misma: “Hace ya casi un año que di mi último concierto con la Camerata y es un placer regresar.
Además, explicó algo más acerca del trío que ahora conforma al lado de Kivivuori y Nieto Dorantes ya que es una nueva aventura que está emprendiendo en su carrera musical: “El trío se llama Óox, que quiere decir ‘tres’ en maya”, y añadió que tienen como propósito difundir la música de cámara tanto mexicana como internacional. Sus programas van desde la tradición vienesa del siglo XVIII hasta el romanticismo y la música contemporánea.
Su talento ya lo ha disfrutado el público de importantes foros de la República como la Sala de Conciertos Carlos Chávez de la UNAM e Instrumenta Verano 2007, solo por mencionar algunos.
