BOGOTÁ, COLOMBIA.- El presidente Álvaro Uribe ordenó ayer que las Fuerzas Armadas liberaran en operaciones militares a la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y al resto de rehenes de las FARC.
“Señores generales, vamos a rescatar a Ingrid Betancourt... no renunciamos un milímetro por rescatar a Ingrid Betancourt y a los otros compatriotas que están en cautiverio con ella”, expresó en tono exaltado en un discurso pronunciado ante la cúpula policial.
“Y que en el Congreso de los Estados Unidos no les quepa ninguna duda que también vamos al rescate militar de los tres norteamericanos”, capturados por la guerrilla en febrero de 2003 cuando su avión se desplomó durante una misión antidrogas, añadió.
“Los campos de concentración de las FARC tienen mayor crueldad que los campos de concentración del nazismo”, dijo el mandatario refiriéndose a los sitios en donde las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, mantienen a los secuestrados.
Las afirmaciones de Uribe se producen luego de saberse que a la ex candidata la encadenan del cuello por las noches en castigo a los cinco intentos de fugarse que hizo, según un compañero de secuestro que recientemente logró escapar.
Betancourt y los tres estadounidenses permanecen en el mismo campamento selvático del que el policía John Frank Pinchao escapó el 28 de abril después de permanecer ocho años cautivo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Uribe también mandó buscar el “rescate militar de los tres norteamericanos que están cautivos por las FARC. Aquí no hay vacilaciones en la lucha contra el terrorismo”.
La madre de Betancourt, Yolanda Pulecio, se ha opuesto al rescate militar de los secuestrados porque haría peligrar sus vidas.
Tras 17 días de vagar por la jungla, Pinchao llegó a la libertad y el jueves, su primer día en la civilización, se reunió con docenas de familiares de secuestrados por las FARC.
Durante un breve encuentro, describió cómo Betancourt era encadenada por el cuello a otros prisioneros cada noche y a veces hasta por 24 horas para prevenir su fuga, dijeron ayer familiares de la ex presidenciable colombo-francesa que se entrevistaron con Pinchao.
“La están tratando como un animal”, dijo su esposo Juan Carlos Lecompte y agregó que temía que sus captores empeoraran el trato a los rehenes luego del escape del policía.
Pinchao no les detalló los intentos de escape, pero esperan reunirse pronto otra vez para escuchar más.
Pulecio dijo que Pinchao “es la primera y única persona que he visto que estuvo con Ingrid desde que fue secuestrada” en 2002, en su campaña presidencial en un enclave guerrillero en el sur de Colombia.
“Yo le mando un mensaje a Ingrid cada mañana a las cinco y me preguntaba si lo podía escuchar o no. Ahora sé que me escucha”, dijo Pulecio.
Las FARC mantienen unos 60 rehenes cuya liberación condicionan a negociar un “acuerdo humanitario” con el Gobierno, pero Uribe rechaza esa posibilidad y la semana pasada ofreció liberar unilateralmente a los guerrilleros esperando un gesto de la guerrilla, que rechazó esa posibilidad.
