El Tribunal Supremo (TS) de Pakistán ordenó hoy la reapertura de la Mezquita Roja de Islamabad, clausurada desde mediados de julio tras el asalto gubernamental contra los radicales islámicos que se recluían en el templo y que se saldó con más de cien muertos.
El jefe del TS, Iftikhar Chaudhry, atendió los recursos presentados por estudiantes islamistas y decretó que la Mezquita Roja se reabra mañana mismo para que los fieles puedan acudir a rezar.
El presidente del Supremo ordenó que se reconstruya la madraza contigua que fue demolida por el Gobierno de Pervez Musharraf, la Jamia Hafsa.
Además, Chaudhry ha abierto diligencias por presunto homicidio contra los militares que participaron en el asalto a la mezquita, que según el régimen causó 100 muertos, aunque una fuente de los servicios secretos elevó la cifra a 300 víctimas.
El alto tribunal prohibió, sin embargo, que se desarrolle cualquier tipo de actividad política en los aledaños de la mezquita.
El templo ha sido escenario de continuas manifestaciones de estudiantes islamistas para reclamar su reapertura.
La operación contra la Mezquita Roja de Islamabad, ordenada por Musharraf, fue ejecutada por el teniente general Tariq Majeed, que ha sido nombrado hoy presidente del Comité de la Jefatura del Estado Mayor, uno de los cargos significativos en la jerarquía de las Fuerzas Armadas.
Desde el asalto a la mezquita, se desató una ola de atentados contra las fuerzas de seguridad paquistaníes, especialmente en el cinturón tribal paquistaní, en la frontera con Afganistán.